Imanol Intziarte

Taberneros de Ikatz Kalea (Donostia) reclaman medidas ante las aglomeraciones y la violencia

Representantes de ocho establecimientos apuntan que esta calle de la Parte Vieja y sus inmediaciones se han convertido en el punto en el que confluyen grupos de personas muy jóvenes a las que han ido echando de otras zonas de la ciudad. Este jueves cerrarán a las 20.00 como protesta.

Taberneros y taberneras de Ikatz Kalea, en la Parte Vieja de Donostia, han comparecido este mediodía para exponer la situación que viven desde hace semanas, con aglomeraciones cada vez mayores en su calle y en las inmediaciones.

Se trata, han explicado, de grupos de gente muy joven, en muchos casos menores de edad, que se reúnen para beber en la calle, llevando sus propios altavoces para poner música, y que en algunos casos presentan «comportamientos violentos entre ellos y con otras personas en la calle, con las taberneras, con el vecindario, subiéndose a andamios, arrojando botellas, continuando su juerga tras el cierre de los bares».

La zona se ha convertido, según han denunciado, en el punto en el que confluyen grupos que fueron «expulsados» de otros lugares en los que se juntaban, como era el puerto o el entorno de San Telmo. «Se ha generado un desplazamiento hacia la Parte Vieja y una masificación nocturna en Ikatz Kalea y calles adyacentes –31 de agosto, San Jerónimo, el atrio de Santa María…–, que desborda toda posibilidad de realizar nuestro trabajo en condiciones», han explicado.

Ello está derivando en una situación de hartazgo y está ocasionando el éxodo de la clientela habitual de estos locales. «Pensamos que no es casual que todas estas personas hayan terminado en torno a nuestra calle, y que posteriormente se haya intentado vincular los altercados acaecidos en el centro de Donostia con dicha calle», en la que se ubican la herriko taberna y otros establecimientos frecuentados desde hace décadas principalmente por personas afines a la izquierda abertzale.

Los taberneros y taberneras, muchos de los cuales residen en ese mismo lugar, consideran que, en la medida en que se limiten otros espacios, el problema aumentará allí donde sí es posible estar. Por ello reclaman «que se habiliten espacios en condiciones en el que los jóvenes puedan tener sus momentos de ocio, incluyendo la apertura de los locales nocturnos, donde sin duda se cumplirían las normas sanitarias mejor que en la calle».

«Pedimos a quien corresponda, al Ayuntamiento, que haga algo, nosotros somos trabajadores, no podemos controlar lo que sucede en las calles. Los vecinos no paran de llamar a los municipales, a la Ertzaintza, pero nadie les hace caso», han resumido.

A modo de protesta, este jueves los bares Belea, Kai, Aurresku, Belfast, Urkamendi, Urraki, Ilargi y Herria bajarán la persiana a las 20.00.