Koldo Landaluze
Especialista en cine y series de televisión

‘Gernika Batzordea’, un documental recorre los 45 años de una iniciativa histórica

‘Gernika Batzordea. 1976tik kontakizun kaleidoskopikoa eraikitzen’ es el nuevo documental de Ibon Meñika y Haritz Petralanda que aborda los 45 años de la asociación Gernika Batzordea. Meñika revela a NAIZ todos los detalles relativos a este proyecto enraizado en nuestra memoria histórica.

Algunos protagonistas del documental en su estreno en Gernika el pasado 22 de octubre. (Kostan DELGADO)
Algunos protagonistas del documental en su estreno en Gernika el pasado 22 de octubre. (Kostan DELGADO)

Siguiendo la estela de ‘Gernikaren egiak’, un documental que fue impulsado en 2017 por la asociación GITE-IPES y que fue dirigido por Ibon Meñika y Haritz Petralanda, el pasado 22 de octubre se estrenó en el Lizeo Antzokia de Gernika ‘Gernika Batzordea. 1976tik kontakizun kaleidoskopikoa eraikitzen’. Dirigido nuevamente por Meñika y Petralanda, recorre los 45 años de intensa y apasionante ruta de la iniciativa Gernika Batzordea y ha sido una realidad gracias a una solidaria campaña de crowdfunding que permitirá el visionado de esta obra en la página Guernica Gernikara.

Este proyecto, en palabras de uno de los directores, Ibon Meñika, tuvo su prólogo «en el 80 aniversario del bombardeo de Gernika que se celebró en 2017. Entonces diferentes grupos unimos fuerzas en la creación de Gernika Memoriaren Lekuko plataforma. A partir de ahí, apostamos por la recuperación, elaboración y dotar de valor al trabajo realizado durante años en Gernika desde la memoria. Gernika Batzordea, como referente principal de ese trabajo, necesitaba de la recopilación de toda su trayectoria con un mérito añadido: nos lo cuentan sus protagonistas de primera mano; con toda importancia vital, histórica y de transmisión que eso sugiere».

Sobre los episodios que encontramos en ‘Gernika Batzordea. 1976tik kontakizun kaleidoskopikoa eraikitzen’, su co-autor nos descubre que el documental esta estructurado en cinco apartados «el primero, ‘Gernikaren bonbardaketaren talde ikertzailea’; su surgimiento en el contexto franquista y sus primeros inicios. El segundo, la reivindicación de ‘Guernica Gernikara’, que el cuadro que representó el horror del bombardeo por parte de Picasso, estuviera en el lugar que lo inspiró: Gernika. En tercer lugar ‘37-87’; el 50º aniversario y los eventos que se organizaron, supusieron un punto de inflexión en las demandas populares de verdad, justicia y reparación, pero con impulso popular vivo y diverso».

«Un cuarto, bloque, ‘Gernikatik mundura’ y la sensibilidad, solidaridad y hermandad fraguada con todos los nuevos Gernikas que el fascismo, el totalitarismo y la injusticia ha creado en el mundo. Por último, ‘Aurrera begira’: junto con la creación de la plataforma Gernika Memoriaren Lekuko, es una mirada a la construcción de un futuro impulsado de una memoria colectiva –caleidoscópica– y viva», añade.

A estos cinco bloques también se suman conversaciones de jóvenes de Gernika que preguntan a los integrantes de Gernika Batzordea por diferentes cuestiones relativas al papel de la mujer, las nuevas generaciones, la consecución de reivindicación de demandas históricas, el papel institucional, como ejemplo de ejercicio memorialístico intergeneracional.

Gernika Batzordea, una singladura apasionante y difícill

En estos tiempos en los que se recuerda constantemente el valor de la memoria histórica, merece recordar el papel que jugó Gernika Batzordea. Para Meñika «Gernika Batzordea surgió en un contexto muy complejo. Aún estaba instaurado el franquismo como régimen, la llamada transición no supuso una ruptura con lo anterior, y prueba de ello es que las demandas realizadas, junto con supervivientes del bombardeo, en su primera comparecencia en abril de 1976, todavía aún, siguen vigentes: Verdad, justicia y reparación de lo ocurrido. Apertura de los archivos militares para esclarecer los hechos. Guernica Gernikara y Gernika ciudad de la cultura».

A la hora de recordar las etapas que han sido las más relevantes y más complejas dentro de la singladura de Gernika Batzordea, el co-director del documental destaca que «sin lugar a dudas su creación y el contexto que le rodeaba, fue de un mérito, valentía, y determinación admirables. Por otro lado, y narrado por sus protagonistas, 1987 fue un momento trascendental: se encadenan en el Buen Retiro –lugar donde estaba el ‘Guernica’– para reivindicar que fuese trasladado a Gernika, la comisión del 37-87, con toda su programación, la creación del símbolo que hoy identifica a Gernika Batzordea, el txori de colores que representa un pueblo vivo, diverso y combativo», recordó Meñika.

«Otro de los aspectos destacados de Gernika Batzordea ha sido, y es, su papel de agente que, aún en los contextos más complejos, ha impulsado puentes de solución política al conflicto de Euskal Herria –participante del espacio Maroño en los inicios de los 90, firmante de Lizarra-Garazi y a día de hoy es parte del Foro Social. Por otro lado, ha estado abierto a reivindicaciones sociales muy amplias, conectado con lo que pasaba en el mundo –la invasión de Irak, Gaza...– muy sensibilizado con pueblos que luchan por su libertad, como Kurdistán, la Sudáfrica del apartheid....no se entendería su trayectoria si no alzásemos la mirada más allá de la línea de trabajo de carácter histórico –que por otro lado ha sido muy extensa– con la participación de H.Southwor, Angel Viñas....la colaboración de Ingo Niebel y Xabier Irujo», subrayó.

Necesidad de crear un espacio para la memoria

Sobre la dificultad de poder acceder a material de archivo histórico, Meñika afirma que «la verdad es que hemos tenido dificultades. En muchos años no se le ha otorgado valor a la recopilación de archivo y nosotros queríamos fomentar esa idea: que un grupo que trabaja la memoria, a raíz de tantos años, ha creado su propia memoria y es necesario recopilarla, contarla y trasmitirla. Hemos contado con la ayuda de Iratzar Fundazioa para conseguir material gráfico –muy poco dado en otras épocas–, hemos buscado material en archivos de personas que participaron en su dinámica y tenemos más material del que aparece en el documental».

Una de las bases del documental es su valor testimonial, aportado por los propios protagonistas. Sobre este apartado el co-autor de ‘Gernika Batzordea. 1976tik kontakizun kaleidoskopikoa eraikitzen’ señala que «la base era esa idea. Gente que ha trabajado tanto durante tantos años que nos cuente de primera mano, su recorrido, y dotarle de valor añadido a esa filosofía de trabajo. Incluso, testimonios que no han llegado a otras generaciones, que se conozcan. Por último, el ejercicio de memoria de crear espacios intergeneracionales para la búsqueda de esa transmisión tan importante y tan poco valorada por instancias oficiales. Destacaría Alberto Gabikagogeaskoa, Juantxo Izagirre, Josu Barandika, entre otros. Son testimonios de personas octogenarias, con una trayectoria muy ligada a luchas diversas y enraizadas en nuestro pueblo. En la sociedad que vivimos, parece que no tienen importancia... pero, la libertad y la justicia no se construye desde púlpitos; sino del trabajo incansable de muchas personas de forma colectiva. Gernika Batzordea es un ejemplo de ello, y merece-debe ser contado. Ese ha sido nuestro ‘leitmotiv’».

Finalmente, el pasado 22 de octubre se escenificó el estreno oficial del documental en Gernikako Lizeo Antzokia, una cita que, según Meñika, se hizo realidad «con la colaboración inestimable de ZineKlub Gernika, con la participación de 150 personas. Realizamos un pequeño acto, donde además de bertsolaris, sus creadores tocaron en directo, por primera vez, la canción ‘Gernika Bizirik’, con Jon Rementeria como creador principal. Y qué mejor escenario para mostrar que Gernika, como testigo de nuestra historia, y lugar de la memoria de este país, que está más vivo que nunca».