Koldo Landaluze
Especialista en cine y series de televisión

Los terrores venecianos de Álex De la Iglesia y la ilusión en Cannes de Estibaliz Urresola

Álex de la Iglesia estrena este 22 de abril ‘Veneciafrenia’, una farsa en clave de terror en torno a los terrores del turismo masificado. Por otro lado, el cortometraje ‘Cuerdas’ de la también cineasta vasca Estibaliz Urresola se estrenará en la 61ª Semana de la Crítica del Festival de Cannes.

El próximo 22 de abril nuestras pantallas acogerán el estreno de ‘Veneciafrenia’, la nueva película de Álex de la Iglesia a través de la cual el cineasta vasco rinde tributo a una ciudad que siempre le ha fascinado y que tan buenos recuerdos le ha legado, como fue el doble premio –mejor película y mejor guion– que se llevó su ‘Balada triste de trompeta’ en el Festival de Venecia de 2010.

En esta oportunidad, De la Iglesia también ha querido rendir tributo a los maestros del ‘giallo’, como Dario Argento o Lucio Fulci, a través de una propuesta de terror en la que, según el director, «se aborda desde la farsa y lo grotesco uno de los grandes males que padecen muchas ciudades que, como en el caso de Venecia, son invadidas por oleadas de turistas».

El guion –firmado por el propio De la Iglesia y su habitual colaborador, Jorge Guerricaechevarría– narra las pesadillescas jornadas que comparte un grupo de turistas –interpretados por Ingrid García Jonsson, Silvia Alonso, Goize Blanco, Nicolás Illoro y Alberto Bang– que llegan a Venecia dispuestos a disfrutar al máximo los célebres y masificados carnavales de la ciudad de los canales.

Pero una vez allí, los jóvenes tendrán que hacer frente a la ira de un grupo de lugareños que, cansados de ser ignorados, están decididos a acabar con la gentrificación y la marabunta de turistas por cualquier medio.

Estos personajes, explicó el director, «son como todos nosotros, viven en un mundo cerrado donde da igual la Venecia de Italia que la Venecia de Las Vegas, que solo quieren cinco minutos para irse de vacaciones y pasárselo bien en un entorno divertido, exótico y extravagante. Buscan la fiesta loquísima en Venecia y, por culpa de eso, terminan involucrados en una tragedia de gente que está luchando por su ciudad y que creen que Venecia es algo más que un parque temático. Y cuando estás viendo todo esto –señala–, de repente desaparece la película y te encuentras a ti mismo con unos problemas que te tocan, en los que estás involucrado».

En este caso, el autor de ‘El día de la bestia’ se ha servido de «la farsa como método para contar una historia, porque permite exageración, contraste, paisajes barrocos y personajes imposibles metidos en una situación increíble».

Por otro lado, «lo bonito de una historia como esta –agregó– es que el comportamiento de los villanos no está tan desencaminado, eso hace que la película sea ambivalente, porque ni los buenos son tan buenos ni los malos tan malos. Eso te hace dudar de tus principios porque, por un lado, no quieres que les pase nada a los chavales, pero por otro, es que piensas que se están mereciendo cualquier cosa; a la vez, piensas que a algunos habría que encarcelarlos, porque no cabe duda de que Venecia está siendo destruida y degradada».

‘Cuerdas’ en Cannes

El quinto cortometraje de la cineasta vasca Estibaliz Urresola, ‘Cuerdas’, se estrenará en la 61ª Semana de la Crítica del Festival de Cannes, cuya 75ª edición se celebrará entre el 17 y el 28 de mayo de 2022.

La obra competirá por varios premios –Leitz Ciné Discovery, Canal+– otorgados por un jurado internacional liderado por la tunecina Kaouther Ben Hania.

La trama se centra en una coral de mujeres que debe afrontar la decisión de aceptar la ayuda de una empresa contaminante de la región para garantizar su continuidad como formación.

Sobre este proyecto, su directora recordó que «hace dos años, en unas jornadas de ecofeminismo, asistí a numerosos relatos de luchas medioambientales impulsados por colectivos de mujeres de todos los puntos del planeta. Entre ellos escuché con atención la ponencia de una médica de Muskiz que, durante décadas, había comprobado los efectos devastadores de la contaminación en la salud, no solo de las personas sino también del tejido social de su pueblo».

La cooperación, la sororidad, la salud y el cuidado de la vida se personifican en la protagonista que, en palabras de Urresola, «me ha permitido vehiculizar numerosos testimonios, detalles y casos reales de las entrevistas realizadas desde entonces. Y para encarnar a Rita, he tenido la enorme suerte de contar con la participación de Begoña Suarez –presidenta de la asociación Meatzaldea Bizirik– que, con 91 años, realiza su primera intervención frente a las cámaras así como de un numeroso grupo de mujeres con las que ensayamos durante más de dos meses».