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Un Bidasoa-Irun que va a más arrolla a Anaitasuna en el derbi de Artaleku (36-24)

El conjunto navarro, con bajas sensibles en su primera línea y en crisis de confianza, se ha chocado contra el portero polaco Jakub Skzyniarz una y otra vez. Jacobo Cuétara ha podido dosificar fuerzas de cara al compromiso del martes ante el Fuchse Berlín.

Julen Aginagalde, imparable para la defensa navarra, ha marcado cinco goles.
Julen Aginagalde, imparable para la defensa navarra, ha marcado cinco goles. (Jon URBE | FOKU)

Tras un inicio de temporada titubeante, el Bidasoa-Irun ha encontrado hoy la fórmula para ser competitivo justo en el derbi vasco de Artaleku, donde ha avasallado por 36-24 a un Anaitasuna desconocido que se ha chocado contra el portero polaco Jakub Skzyniarz una y otra vez.

El conjunto navarro, con bajas sensibles en su primera línea y en crisis de confianza tras perder tres de los últimos cuatro partidos, ha entrado bien al encuentro y todo apuntaba a un choque igualado en el que el Bidasoa iba a tener que sudar para quedarse con los puntos.

No se ha cumplido el guión, ya que desde los primeros minutos los locales se han desatado con un balonmano pleno de acierto en ataque, con el veterano Julen Aginagalde, Asier Nieto y Mitic enchufados para establecer un peligroso 9-4 para el bloque que entrena Quique Domínguez, parciales que parecían contradecir los pronósticos que abocaban este encuentro a la igualdad.

Los navarros no estaban finos ofensivamente, cometiendo un sinfín de pérdidas, mérito sin duda de un Bidasoa que defendía de forma muy notable. Jakub se hacía grande en la portería, por encima del 40% en el primer tiempo, y el marcador ha seguido en guarismos superiores a los cinco goles de ventaja que ha permitido a los amarillos irse al descanso con un panorama tranquilizador para sus intereses.

Anaitasuna estaba obligado a una remontada casi histórica porque la desventaja de ocho goles en Artaleku es una tarea casi imposible para cualquier equipo, los irundarras además han seguido lanzados y como el polaco Jakub también ha continuado enorme bajo palos, las ventajas no han decrecido y los de Iruñea han empezado a verlo imposible según avanzaba el segundo tiempo.

El 30-20 a diez minutos del final era explícito e ilustraba la imposibilidad de los navarros de tener opciones en este encuentro, mientras el conjunto guipuzcoano ha podido vivir un plácido final reservando fuerzas de cara al compromiso ante el Fuchse Berlín el martes en la Liga Europea.

Ficha técnica:

Bidasoa-Irun (36): Jakub (Medhi), Zabala, Asier Nieto (4), Azkue (3, 2 de pen.), Mitic (5), Cavero, (3), Aginagalde (5), Matheus Da Silva (4), Tesoriere, Dariel García (1), Furundarena (2), Gorka Nieto (2, 1 de pen.), Julen Mujika (5), Urruzola (1), Víctor Rodríguez (1).

Anaitasuna (24): Bar (Cancio), Redondo (1), Edu Fernández (2), Meoki (3), Aitor García (3), Bonanno (1), Chocarro (5, 4 de pen.), Castro, Xabi González (5, 2 de pen), Ganuza (1), Elustondo (1), Bazán, Joao Pinto (1) y Ernesto Goñi (1).

Marcador cada cinco minutos: 5-3; 8-4; 9-5; 11-6; 14-8; 17-10- descanso- 20-13; 23-16; 27-18; 32-21; 35-22; 36-24.

Árbitros: Ausás y Florença. Excluyeron a Mitic (2), Azkue, Chocarro y Xabi González.

Incidencias: Unos 1.400 aficionados, algunos seguidores de Anaitasuna, en las gradas de Artaleku.