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Veinte años de la desaparición de Monique Wittig, una lesbiana revolucionaria

Veinte años después de su muerte, la escritora y teórica feminista Monique Wittig está siendo redescubierta en el Estado francés por sus trabajos, poco conocidos por el gran público, sobre el género y el lesbofeminismo.

Monique Wittig, la escritora y teórica del lesbofeminismo.
Monique Wittig, la escritora y teórica del lesbofeminismo. (AFP)

Probablemente su nombre no diga gran cosa al gran público, pero la escritora, ensayista y activista feminista Monique Wittig (Dannemarie, 13 de julio de 1935 – Tucson, 3 de enero de 2003) es una referencia imprescindible del feminismo francés y mundial.

Veinte años después de su desaparición, se han reeditado algunos de sus libros y varias universidades, como la de California-Berkeley, le dedicarán congresos para analizar su corpus teórico.

Su pensamiento, en el que se define la heterosexualidad como un régimen político, se centra en el enfoque de lo que ella denomina ‘lesbianismo materialista’. Las categorías de sexo, género, mujer y heterosexualidad adquieren una fuerte dimensión política en sus textos

Nacida en 1935 en una familia modesta y conservadora, Monique Wittig irrumpió en el panorama literario a los 29 años con ‘L'Opoponax’ (1964, Minuit) que relata el amor de un niño por otro. El libro ganó el premio Médicis.

Le siguieron ‘Les Guérillères’ (1969) y ‘Le Corps lesbien’ (1973), un ensayo que acaba de ser reeditado en francés. En estos textos trabaja los pronombres. Argumentando que lo masculino se ha apropiado de lo universal, aboga por el uso del ‘on’ (pronombre neutro, en francés) y que se eliminen palabras como ‘hombre’ y ‘mujer’.

Más allá de los pronombres, quiere liberarse de normas: masculino o femenino, literatura o ensayo...

«Ella no quiso elegir entre literatura y teoría, por eso incluyó la literatura en la teoría y viceversa», explica para AFP la escritora Emilie Notéris, quien le ha dedicado el libro ‘Wittig’ (2022, ed. Les Pérégrines), una especie de «borrador de una biografía», como la define ella misma.

Del MLF al exilio

El 26 de agosto de 1970 fue una de las pocas activistas que colocó una ofrenda floral en memoria de la esposa del soldado desconocido bajo el Arco del Triunfo de París, en lo que fue el acto fundacional del movimiento feminista francés MLF (movimiento de liberación de las mujeres).

Seis años después, Monique Wittig se fue a los Estados Unidos, en una especie de autoexilio. ¿La razón? Profundas diferencias ideológicas con sus compañeras del MLF. Según Wittig, la lucha implica cuestionar la heterosexualidad como modelo de sociedad.

En el MLF, «Monique Wittig se enfrentó a los límites de lo que era aceptable pensar en un marco que circunscribía el lesbianismo a una simple sexualidad», afirma Dominique Bourque, profesora del Instituto de Estudios Feministas y Género y del departamento francés de la Universidad de Ottawa.

Es esta línea de fractura, Wittin se sintió aislada entre, por un lado, su visión revolucionaria –para algunas excesivamente radical– sobre un sistema heterosexual dominado por hombres al que combatir a través del lesbianismo político, y por otro, el de sus compañeras del FML, que solo veían al lesbianismo como orientación sexual.

Fue «dejada de lado e invisibilizada», afirma a la AFP la periodista, activista feminista y concejala de París Alice Coffin, quien dice que descubrió su pensamiento «de forma tardía». También se inspiró en la obra de Monique Wittig en su exitoso ensayo ‘Le génie lesbien’ (Grasset, 2020).

Sus herederas

Instalada en Estados Unidos, Monique Wittig enseñó en la universidad y escribió textos como ‘La Pensée straight’, publicado en inglés en 1992. Sin embargo, recuerda Emilie Notéris, su vida «no fue nada fácil. No conoció la gloria, al contrario, fue una vida de lucha».

No fue hasta la década de 2000 cuando su pensamiento empezó a circular en el Estado francés gracias a activistas que no dudaron en citar sus textos.

Así, en 2019, las escritoras Virginie Despentes y Anne Garréta, acompañadas de la historiadora Laure Murat, la editora Suzette Robichon y la performer Rébecca Chaillon realizaron una lectura pública de ‘Guérillères’ en la Casa de la poesía, en París.

También influye en novelas como ‘Viendra le temps du feu’ de Wendy Delorme o el libro ‘Sortir de l'hétérosexualité’ de Juliet Drouar.

Para Dominique Bourque, la evolución de la sociedad y de las mentalidades «ha permitido destacar su trayectoria y sus obras». Un redescubrimiento ligado al hecho de que «el feminismo post-MeToo ya no tiene miedo de señalar a los hombres negándose a un discurso de complementariedad entre hombres y mujeres, algo que siempre ha hecho el lesbianismo político», abunda Alice Coffin.

Traducciones

Sus obras se han convertido en indispensables en las bibliografías de introducción a los estudios queer.

En euskara está publicado ‘Pentsamendu heterozuzena’ (Susa, 2017, colección Lisipe), y a su vez hay artículos suyos accesibles online, traducidos por la también escritora Itxaro Borda.

En castellano, también está ‘Pensamiento heterosexual’ (Egales) y ‘El cuerpo lesbiano’ (Pre-textos),