Natxo Matxin
Redactor especializado en deporte. Osasuna

El gol de Abde en la prórroga calienta El Sadar y pone a Osasuna en semifinales (2-1)

Osasuna se ha clasificado esta noche gélida en Iruñea para las semifinales coperas en la prórroga (2-1), con el gol de Abde en el 99 tras finalizar los 90 minutos reglamentarios con empate a uno tras los tantos de Chimy Ávila en el minuto 71 y de En-Nesyri en el 94.

Chimy Avila celebra con la grada el 1-0
Chimy Avila celebra con la grada el 1-0 (Iñigo Uriz | Foku)

OSASUNA 2 - SEVILLA 1

Osasuna estará en el sorteo de semifinales de Copa de este viernes tras llevar la locura esta noche fría a las gradas de El Sadar en la prórroga con el gol de Abde en el 99 después de finalizar 1-1 los 90 minutos reglamentarios ante un Sevilla cabizbajo en Liga, pero que ha puesto las cosas muy complicadas en el torneo del K.O.

15 eliminatorias llevaba Osasuna lejos de El Sadar y su estadio se ha vuelto talismán con unas gradas repletas de ikurriñas y banderas de Nafarroa que han hecho frente a la noche fría en Iruñea. Chimy Ávila ha adelantado a los rojillos en el minuto 71 en una buena maniobra en el área, justo después de que el guardameta rojillo Sergio Herrera se haya tenido que lucir ante el ímpetu hispalense.

Cuando parecía que la victoria estaba al alcance de los de Jagoba Arrasate, y más aún después de dos claras ocasiones falladas por Budimir, el gol de En-Nesyri en el tiempo de descuento, exactamente en el 94, ha silenciado El Sadar, y la eliminatoria se ha ido a la prórroga.

En ella, Abde, en el 99, ha llevado el éxtasis a las gradas y el marcador ya no se ha movido hasta el final con un equipo rojillo blindado en defensa. Premio merecido para los casi 20.000 espectadores que han desafiado al frío (apenas 2 grados durante el encuentro) en el estadio rojillo.

Y eso que los inicios no han sido nada halagüeños. Seguramente fruto de los nervios, la escuadra navarra no ha comparecido hasta mediada la primera mitad. Fría como la climatología, desconocida en sus maneras y desubicada a la hora de apretar al rival, el Sevilla le ha superado en intensidad y anticipación, moviendo con solvencia la pelota y llegando con claridad al marco de Herrera.

De su lado han llegado las mejores oportunidades, con un Rafa Mir incrustado por el costado izquierdo, que ha perdonado el 0-1 superada la media hora cuando se ha plantado solo ante el meta rojillo y ha enviado por encima del travesaño.

Poco antes, los anfitriones han firmado su primer acercamiento con peligro gracias a un cabezazo picado de Kike Barja que ha salido junto al poste. Osasuna no estaba carburando ni era el de otros partidos, todavía menos en su campo, y solo ha asustado a balón parado con otro testarazo de Unai García.

Con algo más de oposición, el cuadro hispalense ha seguido llevando el control del partido y Acuña ha vuelto a meter miedo al filo del descanso con un chut que se ha marchado arriba.

Carrusel de sensaciones

Palabras gruesas ha tenido que usar Arrasate en el descanso, porque su equipo ha salido de manera totalmente diferente y reconocible por la grada. Ahora ya no era el Sevilla el que se llevaba todos los balones divididos y ello incluso le obligaba a achicar, además de tener que estrenarse con un paradón Bono –sustituto de Dmitrovic al descanso– a remate a bocajarro de Chimy Ávila cuando la grada ya estaba a punto de celebrar el gol.

Estaba claro que el tono del encuentro había cambiado, pero no por eso el cuadro andaluz ha dejado de inquietar, y mucho. En apenas dos minutos, Lamela ha obligado a una estirada felina de Herrera y Rafa Mir se ha adelantado a los dos centrales para tocar pegado al poste.

Banderas de Nafarroa e ikurriñas han ondeado por todo el estadio, especialmente en Graderío Sur.

Pero, lo que es el fútbol, ha sido Osasuna quien ha golpeado primero por mediación de un Chimy Ávila que se ha revuelto con mucha eficacia dentro del área a falta de veinte minutos tras ganarla de cabeza Rubén García a centro de Juan Cruz.

Con bastante tiempo por delante, el conjunto local ha necesitado del ánimo de la grada para conservar un resultado que ha podido ampliar cuando el Sevilla ya estaba volcado, pero Budimir no ha sabido materializar un par de ocasiones.

Y Osasuna lo ha pagado en el descuento. A base de centros rasos, el adversario ha acogotado a los rojillos en propia área y de uno de ellos desde el costado diestro ha llegado el empate y el bajón, al entrar En-Nesyri como un avión para empujar a las redes.

Éxtasis en la prórroga

Con un once más para defender –tres centrales– que para atacar, el bloque rojillo se ha metido demasiado atrás en los primeros compases de la prórroga, pero en la primera oportunidad que ha tenido para salir se ha vuelto a poner por delante para delirio del graderío.

Al 2-1 le ha precedido un corner y la posterior mala salida y robo local ha derivado en una apertura a la izquierda para Abde, con la defensa hispalense descolocada, para que el internacional marroquí driblase primero y después chutase con rotundidad a las mallas en el 102.

A los anfitriones les ha tocado de nuevo guardar la diferencia, esta vez con mayor razón y mejor armados atrás, aunque sin renunciar a alguna contada contra, mientras el Sevilla ha forzado la máquina, en ese momento con disparos desde fuera del área.

En uno de ellos, en el minuto 110, Herrera se ha tenido que emplear a fondo para abortar la intentona de Jordán desde la media luna. Las fuerzas ya estaban muy justas por ambas partes y el cansancio ha comenzado a hacer mella en las ideas futbolísticas.

El último minuto de añadido ha sido una pitada ensordecedora para impedir el ataque visitante final, que se ha acabado enredando en una salida de balón de Bono que ha acabado en nada.

Con el pitido final, plantilla, cuerpo técnico y grada se han fundido en un abrazo porque el sueño copero sigue intacto. La predicción del presidente se ha cumplido –pidió en la comida navideña llegar por lo menos a semifinales–, pero este equipo y su hinchada quieren más.

 

Arrasate: «Quiero más viajes en esta aventura»

«Hemos llegado muy lejos, no es fácil y menos viendo qué equipos están en la competición. Esperemos que esta aventura, que comenzó en Fuentes, tenga más viajes», ha deseado Jagoba Arrasate a la finalización del choque con el Sevilla.

El técnico vizcaino ha valorado positivamente el cambio que tuvo su equipo tras el descanso. «En la primera parte no hemos sido nosotros, nos han apretado muy bien y estaban cómodos con el balón», ha reconocido.

Así, «le doy valor a equilibrar el partido y llevarlo al terreno que nos interesaba en el segundo tiempo», ha analizado respecto a cómo los suyos han saltado al campo tras el receso.

Como consecuencia de ello, ha llegado la diana del Chimy Ávila, equilibrada en el tiempo del descuento por el gol de En-Nesyri, que ha tildado de «jarro de agua fría». «Si no haces el 2-0, puede pasar que te empaten, son cosas que tenemos que afinar cuando nos ponemos por delante porque ese segundo gol cierra los partidos», ha admitido.

También ha considerado como fundamental el apoyo de la grada en los momentos más delicados. «Había muchas previsiones de frío, pero he percibido un ambiente muy caliente, la afición estaba volcada cuando más lo necesitábamos», ha explicado.

Por último, se ha referido a los cambios que se ha visto obligado a realizar. «Aimar me decía al final que podía seguir, pero me ha parecido que tenía mucho dolor y necesitábamos frescura», ha comentado. El de Arazuri se ha sometido a pruebas en la Clínica Universitaria del Opus que han descartado una posible lesión ósea. A Moi Gómez el preparador de Berriatua lo ha relevado porque «estaba muy cansado».

Posteriormente han llegado las celebraciones en el vestuario, difundidas por las redes sociales de Osasuna, como esta del equipo cantando una de las habituales melodías de Indar Gorri: «Osasuna ekin jo ta ke, goazen gorriak garaipenera arte».

 

El apoyo de la grada ha sido fundamental en esta eliminatoria, con una gran asistencia pese a la temperatura y al horario, por lo que el club lo ha agradecido, evocando una frase del portero Aitor Fernández a su llegada al club.

 

Ficha técnica:

Osasuna: Sergio Herrera; Moncayola (Diego Moreno, m. 101), Unai García, David García, Juan Cruz; Moi Gómez (Aridane, m. 90+2), Torró, Aimar Oroz (Darko, m. 81); Chimy Ávila (Budimir, m. 81), Kike García (Rubén García, m. 69) y Kike Barja (Abde, m. 69).

Sevilla: Dmitrovic (Bono, m. 46); Montiel (Navas, m. 77), Badé, Nianzou (Suso, m. 88), Gudelj (Rekik, m. 96), Acuña; Jordán, Rakitic, Lamela, Ocampos (Torres, m. 62); y Rafa Mir (En-Nesyri, m. 77).

Goles: 1-0, m.71: Chimy Ávila. 1-1, m. 90+5: En-Nesyri. 2-1, m. 99: Abde.

Árbitro: De Burgos Bengoetxea (vizcaino), asistido por Díaz Pérez del Palomar y Núñez Fernández. Ha mostrado amarilla a Moncayola por parte de Osasuna. Por parte del Sevilla ha amonestado con amarilla a Nianzou y Lamela.

Incidencias: Partido correspondiente a los cuartos de final de la Copa disputado en el estadio de El Sadar ante 19.724 espectadores. El equipo de Fuentes de Ebro, eliminado por Osasuna en Copa, ha recibido el cariño del estadio iruindarra, al saltar al césped en los prolegómenos del partido y ser homenajeado el que fuera su jugador, Luismi, recientemente fallecido en un accidente de tráfico.