Izaro Izu

El bertso de Jagoba, la bengala de Aridane y el plátano de Abde, dulce gaupasa rojilla

La noche ha sido muy larga entre Bilbo e Iruñea para la plantilla y la afición de Osasuna. Y cargada de anécdotas. Lo que empezó con los problemas del bus y el Ramadán de Abde ha acabado con bengaleo en la Plaza del Castillo pasadas las 3.00.

Pablo Ibáñez, ante las masas rojillas en la Plaza del Castillo, pasadas las 3.00.
Pablo Ibáñez, ante las masas rojillas en la Plaza del Castillo, pasadas las 3.00. (Osasuna)

A las 3.00 de la madrugada ha llegado el autobús de Osasuna a una Plaza del Castillo de Iruñea en la que esperaban cientos de personas para celebrar el pase a la final de Copa. Allí ha habido fiesta como en las grandes ocasiones: aquel 2005 de la anterior y única clasificación similar –entonces ante el Atlético-, el billete para Champions de 2006 o los ascensos de 1980, 2000, 2016 y 2018.

Los protagonistas han sido esta vez Sergio Herrera, habitual animador del vestuario con sus «locuras», el goleador Pablo Ibáñez, y también Aridane y Chimy Ávila, que han acabado subidos al kiosko con sendas bengalas. El cansancio de los 120 minutos de agonía en San Mamés no se ha notado, ni tampoco que el sábado espere el Elche en el Sadar; nadie se quería ir a casa.

Junto al ‘Somos un equipo’, en el «cuarto de estar» de Iruñea ha sonado sobre todo el ‘Illa illa illa, nos vamos a Sevilla’. El equipo estaba exultante con lo que se le viene dentro de un mes en la Cartuja, ante Barcelona o Madrid, ahí es nada.

 

Como ya hizo desde el balcón del Ayuntamiento en el ascenso a Primera de 2018, Jagoba Arrasate lo ha celebrado con un bertso que concluye animando a la afición a sumarse al viaje a Andalucía.

 

Antes el de Berriatua ha estado una vez más espléndido en la victoria. En declaraciones post-partido, ha explicado que se ha comedido en las celebraciones por el respeto que merecen San Mamés y el Athletic, y también se ha acordado de Oier Sanjurjo y Roberto Torres, dos leyendas del club relevadas en los últimos tiempos en decisiones que reconoce como muy dolorosas para él.

 

Los jugadores rojillos han llevado las camisetas del 6 de Lizarra y el 10 de Arre en la celebración, y también han mostrado la de Iñigo Pérez, actual segundo entrenador del Rayo que dejó poso igualmente en el vestuario en el tránsito de Segunda a Primera.

También el Athletic ha estado elegante en la felicitación a Osasuna, pese al dolor por una eliminación que no ha merecido pero se le ha escapado por falta de puntería.

 

En una noche tan cargada de anécdotas, dos más para concluir. La primera ha sido en el camino de vuelta desde Bilbo. Rubén García se ha encargado vía Twitter de explicar a la afición rojilla cuánto les quedaba para llegar a Iruñea. No se pierdan la localización; estaba de buen humor el 14.

 

En el partido ha tocado sufrir, pero antes ha habido otro momento que se recordará; el de Abde teniendo que alimentarse en el calentamiento, una vez caída la noche sobre Bilbo, debido a sus creencias religiosas: es Ramadán.

 

No cabe duda que para el marroquí la noche también ha sido memorable.