Arnaitz Gorriti

El jugador de los Warriors Draymond Green, sancionado por dar un pisotón a Sabonis

Los Warriors están cayendo por 2-0 en su eliminatoria frente a los Sacramento Kings y el ala-pívot no podrá formar parte del equipo en el primer duelo en San Francisco. Sabonis también es duda por una «contusión en el esternón».

Draymond Green, justo después de propinarle un pisotón a Domantas Sabonis.
Draymond Green, justo después de propinarle un pisotón a Domantas Sabonis. (Ezra SHAW | AFP PHOTO)

Los Golden State Warriors son los vigentes campeones de la NBA, pero también están perdiendo por 2-0 su eliminatoria de primera ronda contra los Sacramento Kings. Y para más inri, no podrán contar con el ala-pívot Draymond Green en el tercer partido de la serie, el primero que se dispute en San Francisco, después del pisotón en el pecho que Green le propinara al lituano Domantas Sabonis en el transcurso del segundo partido.

A falta de siete minutos para el final del partido y con un resultado todavía incierto, Sabonis caía al suelo luego de pelear por un rebote con Klay Thompson. El hijo menor del mítico Arvydas Sabonis agarró al parecer del pie a Draymond Green cuando este se disponía a salir a la contra, de forma que el ala-pívot de los Warriors no tuvo mejor idea que darle un pisotón al jugador báltico, que se quedó tendido un buen rato sobre el parqué, pese a que pudo seguir jugando hasta el final del partido.

Una acción que en primer momento fue castigada con una técnica, sanción elevada a «flagrante de tipo 2» después de la revisión arbitral, lo cual supuso que Green fuera descalificado –y que tuviera un intercambio nada edificante de palabras e insultos con el público de Sacramento–, para que después, la NBA confirmara mediante una nota que «en base al pisotón en el pecho de Draymond Green a Domantas Sabonis y en vista del historial del jugador», recibirá un partido de sanción –con el salario correspondiente a ese tercer partido–.

«La explicación de los árbitros fue que le pisé demasiado fuerte», resumió un Draymond Green que, como acostumbra, se defendió atacando. «Me agarraron la pierna. La segunda vez en dos partidos», comentó Green al referirse a un incidente parecido –sin llegar a una expulsión– que, según aseguró, tuvo lugar en el primer partido con Malik Monk.

«Tengo que aterrizar mi pie en algún lado y no soy la persona más flexible, no me estiro tan lejos», agregó sobre lo sucedido con Sabonis, amén de criticar a los árbitros por no haber hecho nada sobre esos agarrones.

«Supongo que agarrar del tobillo está bien», ironizó.

Bien o mal, Domas Sabonis tuvo que ser sometido a diversas pruebas que descartaron cualquier lesión dse mayor gravedad en las costillas o los pulmones, pero la «contusión en el esternón» no se lo quita nadie. Tanto es así que el jugador báltico es duda de cara al tercer partido de esta serie.

Contra amigos y enemigos

Sea como fuere, la NBA, a través de Joe Dumars, vicepresidente ejecutivo y jefe de operaciones de baloncesto, firmaba de su puño y letra el anuncio de la suspensión de Green de cara akl tercer partido de este «derbi» californiano. Este veredicto se ha basado «en parte por el historial de Green de actos antideportivos», comunicó la NBA por medio de su cuenta oficial de prensa.

Y es que a sus 33 años, Draymond Green no solo no es un recién llegado a la NBA o a los Golden State Warriors, sino que su fama le precedey más cuando el talento de los «Splash Brothers» no termina de alcanzar para ir pasando rondas rn la postemporada. Después de asaltar el anillo de 2015, ya en 2016 las tuvo tiesas en la Final de Conferencia Oeste, una ronda que los Warriors superaron ante los Oklahoma City Thunder por 4-3 después de levantar un 1-3, con Green asestando no pocos golpes a traición a Kevin Durant. De hecho, un golpe en el «bajo vientre» sobre LeBron james le valió perderse el quinto partido de las Finales de aquel año 2016 que los Warriors perderían por 3-4 ante los Cleveland Cavaliers después de que los de Ohio remontasen un 3-1 adverso. Esta ausencia de Draymond Green y la lesión del australiano Andrew Bogut abrieron la zona y el cielo para las penetraciones de LeBron James en aquella histórica Final.

Lo cierto es que no son estas las últimas acciones duras, o al menos polémicas, que se le conocen a Green, que ya el año pasado, en una dura ronda contra los Memphis Grizzlies las tuvo tiesas con los Warriors, a tal punto que Draymond Green precisó de puntos de sutura por un codazo encajado en el primer partido, posteriormente se perdió un partido por un golpe a Brandon clarke y fue multado por sus gestos con el público de Memphis. Ya este mes de marzo tuvo un cruce de palabras con el jugador canadiense de los Grizzlies Dillon Brooks.

«¿Que hablo demasiado? ¡Claro! Tú también hablarías si hubieras ganado cuatro anillos, te hubieran elegido como Defensor del Año, cuatro All-Stars o dos oros olímpicos», le espetó entonces el ala-pívot de los Warriors.

Aunque ya queda bien clara la narrativa de «pleitista» de Draymond Green, lo cierto es que sus cuitas no solo han tenido en cuenta a sus rivales o al público, sino también a sus propios compañeros. En noviembre de 2018 una fuerte discusión con Kevin Durant, en aquel momento miembro del plantel de los Warriors y MVP de las Finales de 2017 y 2018, le acarreó una multa de 120.000 dólares y, se dice, que precipitó la salida de Durant a otras latitudes, pasando a Brooklyn para recalar esta temporada en Phoenix.

La última algarada del número 23 de los Warriors ha sido esta misma pretemporada, luego de golpear a su compañero Jordan Poole en un entrenamiento, motivo por el cual Draymond Green estuvo temporalmente apartado del equipo aunque todo acabó con una multa y una disculpa pública, sin llegar a suspender al jugador, que por cierto termina contrato.

«Me equivoqué por lo que hice y por eso pedí perdón al equipo y a Jordan, pero quiero dar un paso más. La publicación del vídeo –del puñetazo– es algo que provoca mucha vergüenza. Es algo que me incomoda a mí, y eso es algo que me afecta a mí, pero también es la sensación de incomodidad que Jordan tiene, que este equipo tiene, que esta franquicia tiene», dijo Green en aquel entonces.

Cluth player

A propósito de esta serie eliminatoria, De'Aaron Fox, de los Sacramento Kings, fue elegido este martes como mejor jugador de la NBA en el denominado «clutch», en los finales apretados de partido.

Fox está siendo junto al lituano Domantas Sabonis el gran protagonista de la extraordinaria temporada de los Kings, que regresaron a los play-offs por primera vez en 17 años, tras clasificarse terceros en la Conferencia Oeste.

El jugador de los Kings ya lleva 194 puntos anotados en los momentos finales de partidos apretados, rozando un 53% de acierto en tiros de campo y un 32% en tiros de tres puntos.

Hasta el momento, promedia cinco puntos por partido en los finales apretados y ya ha firmado tres canastas de la victoria en el último segundo de partidos en el cuarto período o en la prórroga.

Sin sorpresas

Por lo demás, la jornada de play-offs ha dejado pocas sorpresas. Por ejemplo, los Boston Celtics parecen encaminados a finiquitar su serie contra los Atlanta Hawks por la vía rápida. De hecho, los «Orgullosos Verdes« ya aventajan a los de Georgia por 2-0 después de imponerse por 119-106, con un Jayson Tatum autor de 29 puntos y diez rebotes, con seis asistencias y cinco triples, apoyado por los 26 puntos de Derrick White, con un brillante 11 de 16 en triples.

En cambio, Cleveland Cavaliers y Phoenix Suns se han repuesto de sus respectivas derrotas ante los Knicks y los Clippers y han empatado a uno su serie.

Con un Darius Garland de 32 puntos y una defensa feroz, los Cleveland Cavaliers han igualado 1-1 este martes la serie de primera ronda de los play-offs al imponerse a los de la Gran Manzana por 107-90 que se desplaza ahora al Madison Square Garden para los dos próximos partidos con todo en equilibrio.

Los Cavaliers han respondido a la derrota sufrida el sábado con una actuación de gran solidez y apenas han concedido nada a los Knicks, que se han quedado con un modesto 36,7% de acierto.

En Arizona, un monumental Devin Booker, con 25 de sus 38 puntos en la segunda mitad, ha destrozado a Los Ángeles Clippers elevando el empate a uno tras imponerse por 123-109, una eliminatoria bien divertida que se desplaza ahora a la Crypto.com Arena angelina y que sigue teniendo a los californianos con ventaja de campo.