Daniel   Galvalizi
Periodista

Junto a Javier de Andrés, Feijóo embiste contra el PNV

El presidente del PP presenta en Madrid a su candidato a lehendakari con una dura retórica contra la amnistía y hurgando en las contradicciones jeltzales. El líder de los populares vascos advierte de un pacto PNV-EH Bildu, azuza el fantasma de la inmigración y critica algunos derechos lingüísticos.

Feijóo y De Andrés, este martes en Madrid.
Feijóo y De Andrés, este martes en Madrid. (Eduardo PARRA | Europa Press)

«Nada de lo que sucede en España es ajeno a Euskadi y lo que ahora sucede en España empieza a ser patético», ha disparado Alberto Núñez Feijóo. El presidente del PP comenzaba su discurso de presentación en Madrid de su candidato a lehendakari, Javier de Andrés, para las próximas autonómicas de la CAV. Nada más comenzar ya avanzaba el tono.

Es una jornada especial en la capital del Estado español, en días ya de por sí que vienen siendo convulsos. Esta tarde está prevista la votación en el pleno del Congreso de las enmiendas al proyecto de amnistía que lleva la firma del PSOE y cuyos cambios se han pactado en parte, mientras que otros relevantes, como los de incorporar la amnistía en presuntos delitos de «terrorismo», están pendientes.

En este caldo de cultivo justo Feijóo tenía en agenda la presentación de De Andrés en el Foro Nueva Economía, que organiza desayunos informativos en Madrid, Barcelona y Bilbo. En el Hotel Ritz estaba el diputado vasco Carlos Iturgaiz, el tránsfuga de UPN y ahora diputado en las Cortes, Sergio Sayas, el senador Javier Maroto y representantes de la vieja guardia popular como Dolores de Cospedal, Ana Pastor y Adolfo Suárez Illana.

«Hay una ley sin precedentes en democracia, impensable en cualquier país de nuestro entorno, hecha en un chalet de un prófugo en Waterloo», ha proseguido Feijóo, dejando la política vasca para después. Lo primero era machacar con el tema del día, incluso banalizando algunas cuestiones que deberían exigir más cuidado: «Esta es una ley que dice que hay un terrorismo bueno y un terrorismo malo, un paso más en el proceso de degradación de la política y las instituciones».

En el mismo tono trumpista ha denunciado que la posible amnistía «ampara los contactos de los independentistas con una potencia agresora, Rusia», haciéndose eco de la causa abierta por el juzgado número 1 de Barcelona en la que todavía no hay evidencias sino investigación en curso, casi siete años después. También nombró «10 hitos» del Gobierno de Sánchez y ha señalado que «el décimo será esta tarde: el mayor atropello a la igualdad y a la separación de poderes en una democracia occidental, otorgando el privilegio a los delincuentes de escribir sus propias leyes».

Contra el PNV

El expresidente de la Xunta ha citado al periodista Josu de Miguel al comenzar su retórica contra el PNV, argumentando que en la actualidad todo funciona como «el partido unificado de Euskadi», con la entente según él entre los jeltzales, el PSE y EH Bildu. «Lo que tenemos enfrente es un multipartito, cada uno con sus intereses particulares que siempre son negativos y disolventes para España y las comunidades autónomas. Esta no es una lucha contra la España centralista y única, no, sino contra la España de las autonomías», ha recalcado.

También ha enfatizado que «el proyecto de Javier de Andrés es alternativo porque busca poner respeto frente al insulto, apostar por la libertad frente a la imposición, abrir el País Vasco a España y el mundo, quiere mérito frente a la ideología, se compromete con la lealtad frente al chantaje».

La estocada final contra el PNV, partido al que desde septiembre critica con asiduidad por no haberle apoyado en su investidura y haber elegido al PSOE, iba a ser señalando sus contradicciones con cierto electorado: «Sé que hay un votante huérfano ante esta amalgama de intereses, huérfano de la política de gestión que alguna vez representó el PNV o de defensa de lo común que representó alguna vez el PSOE. Hoy quien marca la acción política de Euskadi es Bildu».

En ese sentido ha considerado que el PP de la CAV «es la única alternativa» ante unos «multipartitos que se pondrán de acuerdo» y que «nunca se van a abrir al talento de otros españoles en otras comunidades, ni promoverán el mérito frente a la imposición».

El exdiputado foral por Araba y exdelegado del gobierno en la CAV ha segudio el mismo derrotero al subir al atril. Lo primero que ha hecho es recordar que le ganó al PNV «cuatro veces» en Araba, tras recibir la bienvenida del presentador del foro con un  sugestivo «¿cómo se siente en la capital del reino?».

«Hay muchos vascos que se van a España pero no hay casi españoles que vayan al País Vasco, los alumnos vascos no tiene el nivel que merecen, tenemos un flujo de jóvenes que se marcha porque el nacionalismo no ha logrado hacer una tierra atractiva y el mercado laboral se ha fracturado mucho porque se ha utilizado la autonomía vasca para fracturar», ha denunciado, y ha criticado los derechos lingüísticos establecidos diciendo que se pierden «personas cualificadas que no tienen por qué responder a valores lingüísticos».

Contra el euskara ha habido un poco más. «Hay un declive continuado y profundo de la sanidad», ha añadido, pero no por la falta de inversión pública sino por la presunta «imposibilidad de disponer de profesionales, porque si hay un sanitario que se saca su MIR y lo hace en Valladolid o Zaragoza, luego no vuelve a Euskadi porque le exigen un nivel de euskara que igual no lo va a poder asumir».

Crítica a «las huelgas»

«El modelo político (de la CAV) no defiende el mérito, estamos perdiendo capital humano muy importante», ha afirmado y ha criticado que «el 50 por ciento de las huelgas en España tienen lugar en el País Vasco, un grado de conflictividad laboral enorme que dificulta la competitividad de Euskadi».

Ante un auditorio que lo ha interrumpido una vez con aplausos cuando ha dicho que «hay una nación que es España», De Andrés también ha acelerado contra el PNV: ha dicho que su candidato a lehendakari, Imanol Pradales, él lo conoce y tiene sus «respetos» pero que es «un hombre sin liderazgo dentro» de su partido y ha ridiculizado entre risas irónicas a Andoni Ortuzar: «Él dijo un jueves que ellos eran diferentes y que tenían su forma especial de elegir los candidatos, y el viernes se publica que no iba a ser Urkullu y el del proceso especial acaba diciendo el sábado quién era el candidato».

Ante una pregunta del auditorio, ha criticado que «en el País Vasco hay una posición muy ‘open arms’ con la inmigración» y que ahora más allá de las bromas lo ve «en serio» que pueda haber un problema por el cambio en este sentido en Catalunya.

Al concluir, ha opinado que el PNV pactará indudablemente con el PSOE y dijo que Ferraz se guarda la carta de EH Bildu «para las diputaciones en 2027» y para «otros pactos, como el tema de las prisiones». Ha augurado que le irá mejor en las próximas autonómicas, posiblemente a realizarse a fines de abril, de lo que dicen las encuestas porque el electorado ve que «la política sanchista no es buena para el modelo vasco» porque «la asistencia y lo de la paguita no es bueno cuando tienes que competir en mercados internacionales». Tras unos abrazos y fotografías con Feijóo y los otros líderes y diputados conservadores, De Andrés se ha ido del hotel habiendo dejado claro ambos cuál es el tono que pondrán a la próxima campaña.