Personas vinculadas al ámbito sindical, ecologista, feminista, movimiento asociativo e internacionalista han presentado este lunes en Bilbo el colectivo Ezker Konfederala, que apuesta por impulsar en la CAV «una izquierda plural, amplia, incluyente y abierta a las propuestas de los movimientos sociales», que se consolide como primera opción en los comicios del 21 de abril y pueda asumir el reto de gobernar. Consideran que EH Bildu está llamada a liderar la alternativa a gobiernos de PNV y PSE, «ampliando sus alianzas, con vocación integradora, a sensibilidades y tradiciones políticas que coexisten en la izquierda».

Tras debates y reflexiones entre quienes conforman Ezker Konfederala, un grupo de sus componentes, entre los que se encuentran el ex consejero Javier Madrazo, el abogado y exdecano de la Facultad de Relaciones Laborales de la UPV-EHU Ángel Elías o los sindicalistas Paul Nicholson y Jesús Uzkudun, han dado a conocer el manifiesto ‘Más izquierda, mejor país’ con el que aspiran a «favorecer la unidad de la izquierda vasca para impulsar una sociedad más democrática, justa, igualitaria, inclusiva, feminista, sostenible, pacifista y republicana».

Estiman que EH Bildu representa hoy la «principal referencia para la alternativa» a los gobiernos de PNV y PSE, dada la «adaptación de su propuesta política a las necesidades de la gente, responsabilidad en las instituciones, cohesión interna, voluntad de diálogo y capacidad de movilización».

Precisan que la izquierda vasca va más allá del espacio independentista y que sectores vasquista, federalistas, confederalistas y republicanos, que reconocen el derecho a decidir, «son imprescindibles para que el cambio político en Euskadi sea posible».

Ampliar alianzas

Animan a EH Bildu a liderar ese cambio, «ampliando sus alianzas, con vocación integradora, a sensibilidades y tradiciones políticas que coexisten en la izquierda de nuestro país, en la puesta en marcha de un frente amplio, que conecte con la mayoría social de progreso, y que pivote sobre un programa común, que permita la confluencia estratégica con sectores de la izquierda no independentista».

Para Ezker Konfederala, la sociedad vasca reclama una alternativa para un cambio social y político, «que nunca llegará de la mano de gobiernos PNV-PSE». «Es el momento de abandonar la resignación y mirar al futuro con ilusión renovada», subrayan.

Les preocupa la escalada bélica, el auge de la extrema derecha, el cambio climático y quienes lo niegan, o la legitimación del racismo y la xenofobia como respuesta al fenómeno de la inmigración, entre otras problemáticas.

Estiman que el retroceso electoral del PNV es fruto de su «arrogancia» y «autocomplacencia» y de estar «cada vez más próximo a las élites económicas y empresariales», «con la complicidad y apoyo del PSE, alejado de su base social».

Por contra, en clara referencia a EH Bildu, reconocen «la coherencia de quienes han optado por evitar el ruido y la desestabilización para actuar con responsabilidad defendiendo derechos y propuestas que ayuden a mejorar la calidad de vida de las personas».

En su análisis mantienen que el Gobierno de Lakua y los partidos que lo sostienen, «movidos por la inercia y la escasa ambición social, son los últimos responsables del grave deterioro del sistema de salud, debilitamiento de la educación pública, deterioro de la red asistencia o declive industrial».

«No son capaces de impulsar un sistema productivo que promueva riqueza, empleo decente, que sea respetuoso con el medio ambiente y que genere, a través de una fiscalidad justa, los recursos suficientes para implementar derechos, como la renta básica incondicional o un nuevo modelo de servicios públicos de calidad», añaden en su reflexión.

En su opinión, la insistencia del PNV en «culpar a la lucha sindical y a la movilización ciudadana de propiciar un clima de confrontación para deteriorar la imagen del Ejecutivo vasco es un ejemplo más de su inoperancia y pone de manifiesto la prioridad de apostar en las próximas elecciones autonómicas por un cambio de ciclo político, en el que la izquierda vasca trabaje conjuntamente, generando confianza, ilusión y esperanza».