Por el vertido registrado en julio de 2022 en la regata de Arakaitzerreka han empezado a declarar ante el juez desde este martes un total de 17 directivos de la incineradora de Zubieta.

El 13 de julio de 2022, Arkaitzerreka amaneció teñida de rojo y con espuma. Durante cuatro meses, GHK estuvo negando cualquier responsabilidad, hasta que, según asistentes, el diputado de Medio Ambiente, José Ignacio Asensio, terminó indicando el 3 de noviembre de 2022 ante la asamblea del Consorcio que la incineradora de Zubieta tenía un problema de estanqueidad o filtraciones de lixiviados.

Ese vertido ha terminado llegando al Juzgado, ante cuyas puertas, el presidente de GuraSOS, Joxe Mari Izeta, ha señalado que «no sabemos cómo va a acabar este proceso judicial, pero a raíz del mismo, ya han quedado constatados dos hechos: la incineradora generaba líquidos y lixiviados que no debían generar y a los que había que dar salida, causando graves problemas medioambientales y de salud en las personas. Así como que hay responsabilidades personales en estos hechos».

Según Izeta, «sabemos, además, que dichos lixiviados seguían produciéndose a menos hasta finales de 2024, fecha en que fue detectado su transporte a Ecofert, en la localidad navarra de Artaxoa, así como a Sader en Bilbao, con todo el escándalo y polvareda interinstitucional que ello generó. Desconocemos, de momento, si a día de hoy se siguen produciendo dichos lixiviados y la salida que se les da».

Al respecto, ha explicado que «ese es el motivo que se halla en el origen de las presentes diligencias judiciales. Por otra parte, la comparecencia de supuestos responsables por dichos vertidos, en calidad de investigados (‘imputados’, en la denominación jurídica anterior) que se inicia hoy y continuará en principio mañana y pasado, responde a un informe emitido por el UCOMA de la Guardia Civil en el marco de las investigaciones solicitadas por la Fiscalía, a instancias de GuraSOS, y a las que el Juzgado de Instrucción nº 5 de Donostia dio curso».

Organigrama de intervención

Ha recordado que en el citado informe, «la Guardia Civil define el organigrama de intervención en la gestión de la incineradora. A la cabeza de dicho organigrama, se halla GHK, cuyo presidente es el diputado Asensio, así como César Gimeno en calidad de director general de la entidad y Nagore Peñalba en el papel de directora técnica, expresamente citados en el informe». A continuación, se sitúa «a la empresa concesionaria Ekondakin y, finalmente, a la filial de esta en calidad de operadora que es Ekobal».

Sin embargo, «a la hora de confeccionar la lista de imputaciones, solo aparecen directivos de Ekondakin y Ekobal, pero no se explica el motivo de la inexistencia de los máximos responsables de GHK, cabeza del organigrama del funcionamiento de la incineradora y entidad que solicita, por ejemplo, las correspondientes licencias de autorización ambiental del Gobierno Vasco», ha criticado el presidente de GuraSOS.

Ha concluido indicando que «este es el marco resumido en que se producen las declaraciones de estos días y que nos gustaría pensar que aportarán alguna luz a la causa investigada. No vamos a precipitarnos en valoraciones más extensas hasta ver qué dan de sí estas diligencias».