«Tenemos equipo para pelear por Europa, pero toca demostrarlo»

David Zurutuza es uno de esos pocos futbolistas que habla con claridad y trasmite lo que siente, lo que ayuda a entender las claves de que la Real esté en el buen camino.

¿Qué se siente cuando se les considera a usted y a Illarra claves en la forma de jugar de la Real?

Pienso que todo influye. Es importante siempre tener un buen medio campo, pero la salida de balón viene desde atrás. El primero que ataca es el portero, tener unos centrales que saquen el balón limpio al medio campo te quita mucho trabajo. Si el balón te viene en mejores condiciones tú lo puedes dejar a los de adelante. Es una cadena. No es que no me guste que se me considere clave, es que todo es clave. Por supuesto que el medio campo es superimportante, pero todo lo es. Para que tenga un balón bien, el defensa me lo tiene que dar en condiciones.

Pero también defensivamente son los que dan el equilibrio, que no es fácil cuando los laterales suben tanto y los cuatro jugadores más adelantados intercambian sus posiciones y eso les hace estar más abiertos y descolocados cuando se pierde el balón...

Está abierto, pero se intenta que cuando el balón está por un lado cierre el lateral del otro y el extremo intenta ayudar al centro del campo. No tengo la sensación de estar expuestos a que nos puedan hacer daño. En los últimos partidos estamos robando muy rápido en campo contrario con una buena presión. Muchas veces los rivales rifan el balón y no tengo la sensación de sufrir en defensa.

¿Se puede comparar la idea de Eusebio con la de Montanier y que es un entrenador ideal por las características del equipo?

No creo que sea igual que con Montanier, más que nada porque con Eusebio hay muchos más conceptos. Su aportación no hay más que verla. La diferencia la pone el entrenador. Siempre me preguntan si se nota diferencia de un entrenador a otro y no hay más que ver cómo juega cada equipo con cada entrenador. Nosotros tenemos que estar con el entrenador y creer en lo que hacemos aunque haya críticas. Nos critican a nosotros y al primero al entrenador porque es el primero del barco.

El año pasado Eusebio quería jugar así y al final el equipo ganó sus partidos a base de competir...

No es lo mismo que te llegue el entrenador con la Liga empezada con un planteamiento y unas ideas distintas. Vas cogiendo cosas básicas que tienes que pulir con el tiempo y necesitas competir y ganar e ir sumando. Con la pretemporada tienes más partidos y entrenamientos, otra pausa para poder coger lo que quiere el entrenador y, si no crees en lo que está proponiendo, no vas a llegar a nada.

¿Comparte que el juego actual de la Real es el que le conviene por las características de los jugadores y del césped de Anoeta?

No sé si nos conviene, pero siempre se dice que esta Real tiene gente muy técnica, que juega muy bien, pero también en el estado físico yo siempre he notado en el campo que contra la mayoría de los equipos nos interesa que haya ritmo en el partido y hay que combinar eso con la técnica. Son muchas cosas. Nos conviene que no sea un partido pausado.

Porque al comienzo el juego era bastante lento y espeso...

Empezamos con el Real Madrid y el Espanyol nos vino con las dos líneas de atrás muy juntas y todo el partido a defender y a perder tiempo. La sensación que tenía es que dominábamos, pero que era muy difícil entrar. Si hubiéramos metido en la primera parte habría sido otro partido completamente diferente. Si hubiéramos abierto la lata y tener que irse al ataque el Espanyol, el partido cambiaría con más espacios.

Pero con los partidos el juego mejora y tiene mayor velocidad...

Sobre todo son los automatismos. Todos llevamos un montón de años jugando a fútbol, viene un entrenador que te plantea unas cosas, te dice que hay que defender y atacar de una manera y son conceptos diferentes. Tienes que interiorizarlos y hacerlos en milésimas de segundo. Y esos automatismos hay que trabajarlos y no una vez, sino todos los días. Y con el tiempo los asimilas y sale el resultado. Cuando la gente lo tiene bien asimilado da igual cambiar un jugador u otro, toda la máquina está ya engrasada.

Además lo que estoy notando, a parte de estar cogiéndolo, es que el equipo está jugando tranquilo, estamos seguros de nosotros mismos, hay confianza y la gente de arriba se está atreviendo a hacer más cosas. Hay muchos movimientos arriba y eso a los demás nos permite tener más opciones. Es más rico el juego. Si tienes para elegir dos o tres opciones intentas elegir la mejor, pero por lo menos tienes siempre más opciones.

¿Habla de confianza y alegría?

Estás contento cuando las cosas están bien. Cuando perdimos contra el Eibar no estábamos contentos, pero estamos tranquilos, vemos que el equipo está funcionando, estamos dominando los partidos y luego nos falta estar más acertados arriba. Pero para eso cuanto más lleguemos arriba, más probabilidades de meter gol tendremos.

Además la mejor manera de defender es tener el balón...

En el medio del campo lo que quieres es tener la pelota y que corra el contrario. Esta manera de jugar te permite tener largas posesiones y no estar corriendo siempre a por el balón y la clave es cuando pierdes recuperar rápido y estar fresco para ello, que todo esté bien engranado para que no falle ninguna pieza y que no te pillen. Es un trabajo que no se puede hacer de un día para otro, que es lo que no se suele dejar. Tiempo.

¿Esta Real tiene capacidad para entrar en Europa?

Por supuesto que tenemos equipo para pelear por Europa, pero hay que demostrarlo. Es una Liga muy competitiva, con buenos equipos y es muy complicado entrar en Europa. Hay pocos puestos para todos los equipos buenos que hay, pero pienso que sí.

¿Y de devolver a la gente a Anoeta con juego y resultados?

Quiero creer que sí. Es un espectáculo, la gente quiere ver buen fútbol y los últimos partidos han sido buenos y espero que la gente se enganche. Es verdad que Anoeta, con las pistas, engancha mucho menos que otros campos y que al final el espectáculo queda un poco lejos. Sobre todo no se percibe la velocidad a la que se está jugando.

¿En ese objetivo sería importante ganar el derbi del domingo?

El Athletic es como siempre un equipo que juega muy bien, difícil, muy competitivo, pero es un equipo al que en los últimos años le estamos haciendo mucho daño allí. Les veo bien, pero nosotros también y será muy bueno ganar. Es complicado porque es un campo difícil, pero ya hemos ganado allí y a ver si podemos volver a hacerlo.

¿Ahora el objetivo es tener una continuidad, que es quizás la asignatura pendiente?

En el juego es difícil mantenerla, pero creo que, quitando el partido de Eibar, que fueron un cúmulo de cosas, en Villarreal perdimos, pero el equipo llevó el peso del partido, como ante el Espanyol, que empatamos. Pero estamos teniendo buenos partidos con un juego ofensivo, intentando crear más que destruir. En los resultados nos falta esa continuidad, pero en el juego estamos en una buena línea. Ganar tres partidos seguidos nos daría un empujón hacia arriba y te verías en una situación muy buena, pero en las últimas jornadas no se ve a ninguno que gane todo. Pero siento al equipo con hambre.

¿Qué piensa cuando se les critica por falta de competitividad?

No he salido nunca a perder ningún partido. Algunos no han salido bien, pero me acuerdo que antiguamente fuera nos costaba mucho más y los últimos años estamos cambiando eso y sacando grandes resultados fuera. Pienso que sí somos competitivos. Mirando los otros equipos cuando juegan contra nosotros, para ellos somos un equipo difícil, aguerrido, con mucha intensidad, que hace que los partidos les resulte difícil con nuestro juego.

«Me lesionaba por algo, ahora juego mucho más fácil, no voy a muerte a todos los balones como antes»

Su carrera está marcada por las lesiones...

Soy el primero que lo sufre. A parte de estar lesionado y de no poder ayudar a los compañeros, es muy duro estar en el gimnasio sin poder hacer lo que te gusta. Cuando entras y no tienes continuidad es muy difícil coger la confianza en el juego, aunque con mi experiencia ya he aprendido y no me cuesta tanto como al que no está acostumbrado. Me siento cómodo en el campo y con la experiencia, con 30 años, ya tengo otra madurez, pero es muy difícil y duro para uno mismo.

¿La gente no valora que se lesiona por jugar a mucha intensidad y proteger el balón con las piernas y recibir golpes?

Está claro que es por algo. No me lesiono porque sea frágil, no me siento más frágil que otros. Algo tiene que ver la manera de jugar. Físicamente me castigo mucho por cómo juego. Protejo, meto la pierna, juego con mucha intensidad... Ahora poco a poco estoy aprendiendo, juego mucho más fácil, no voy a todos los balones como antes a muerte. Decido cuáles son los importantes y cuáles no. Y al final con los años he aprendido y, desde el año pasado cuando volví, solo he fallado en un partido amistoso de pretemporada.

¿Molesta que preguntemos por lesiones?

Por supuesto que te molesta, pero con todas las que me han pasado entiendo que la gente lo haga. Es lo que hay. Estoy expuesto a eso. Hay algunos que ni tienen tacto, pero otros lo dicen por preocuparse por ti. A nadie le gusta tener lesiones, pero es una cosa que hay en el fútbol. Quiero jugar y tener una temporada completa y disfrutar del fútbol, que los últimos años han sido una pesadilla.

¿Sin lesiones y con continuidad entiende que puede alcanzar su mejor nivel?

La continuidad lo que te da es estar en el campo cómodo, entiendes el fútbol mucho mejor, los tiempos... Te sientes mucho mejor. El año que jugamos en la Champions miércoles-domingo, con mucho más rodaje, al final juegas todas las semanas y tienes la sensación de estar todo el rato jugando, te sientes cómodo.

¿Siente que ahora se encuentra en el mejor momento de su carrera?

El otro día me preguntaron eso y no sé si estoy en el mejor momento, pero leo mejor el juego, lo entiendo mejor. Físicamente no estoy con la fuerza de hace tres años, pero sí que técnicamente me siento muy bien en el campo e igual puede ser mi mejor momento. Aunque ojalá que no y que esté por llegar...J.I.