Con Mestalla en la retina
Los rojiblancos buscan dar continuidad al juego del día de Valencia pero con victoria, ante un Sevilla que viaja sin Banega ni Mercado.
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Desde el 26 de setiembre de 2009, día en el que el entonces equipo entrenado por Manolo Jiménez ganó por 0-4 en San Mamés, todo lo que ha cosechado el Sevilla en tierras bilbainas han sido derrotas. Y nadie más que Kuko Ziganda y sus hombres desean que siga la racha negativa de los del Nervión. Para ello, el técnico navarro apeló ayer al que podríamos llamar ‘espíritu de Mestalla’. El mismo que dejó un buen sabor de boca en cuanto a juego, que no de resultado. Esta vez, los rojiblancos quieren que ambos objetivos confluyan, aunque a nadie se le escapa que la victoria, más allá de las sensaciones, se hace indispensable para que el equipo no pierda más crédito.
El feudo bilbaino sigue siendo asignatura pendiente para los leones. La huella que el equipo ha transmitido hasta la fecha en casa han dejado mucho que desear y aún resuenan los pitidos de la grada tras el ‘gatillazo’ ante el modesto Zorya en Europa League. El propio Ziganda asumió ayer que tienen una cuenta pendiente en su estadio, donde no terminan de encontrar fluidez en su fútbol. Hoy toca hacerlo ante un Sevilla que solo suma una derrota en siete jornadas, que acumula cinco victorias y que solo ha encajado tres goles, dos de ellos en el Wanda Metropolitano. Solo uno de cada cuatro remates que recibe va a portería, según las estadísticas de Fútbol Avanzado; en el caso de los rojiblancos, casi uno de cada dos. Todo apunta a que el Athletic va a necesitar cambiar de bombillas para que su juego ofensivo se ilumine.
Los andaluces de Eduardo Berizzo pasan por ser aún un conjunto en construcción, pero al que su poderío atacante le está dando puntos. Un equipo al que le gusta la pelota, el tercero que más pases hace en campo rival por detrás de Madrid y Barcelona, o el cuarto con mayor posesión media, tras madrileños, catalanes y Celta. Veremos la actitud con la que llega a la capital vizcaina, toda vez que lo hará sin dos de sus hombres más significativos, como el central Mercado y su ‘cerebro’ Banega, que se quedan en casa tras sus partidos internacionales. Dos pilares sobre todo a la hora destruir el juego del contrario.
En el Athletic, más que los elegidos por Ziganda para sacar este complicado duelo, las dudas están en si el equipo será capaz esta vez de transmitir sobre el campo esas ganas de hacerlo bien que los jugadores aseguran tienen de que llegue el partido. Veremos, sobre todo, si se consigue hilvanar juego, si hay lucidez a la hora de generar fútbol en ataque o si volveremos a ver un Athletic en el que entre Unai Núñez y Laporte suman el 25% de los pases del Athletic, la segunda pareja de centrales, tras la del Celta, con mayor protagonismo a la hora de jugar la pelota. Lekue o Bóveda en banda, veremos qué pareja en la medular, si Córdoba tiene el premio de su día en Mestalla. «En Valencia nos adaptamos sin Iker, hay jugadores que pueden suplirlo, Willy, Susa o Iñigo lo están haciendo bien. No son iguales, pero pueden sustituir su juego en ataque», respondió Ziganda.
Día grande en San Mamés, con Mestalla en la retina.
Ziganda: «Necesitamos un partido redondo»
«Necesitamos un partido redondo», sintetizó Kuko Ziganda lo que necesitan sus jugadores hoy. «En Valencia vimos cosas importantes y queremos trasladarlo en casa. Nos queremos agarrar a detalles que queremos trabajar, y mañana –por hoy– hay otra oportunidad de hacerlo... y ganar por supuesto», profundizó el técnico navarro. «Allí apretamos bien, estuvimos más juntos, el partido más completo de los que llevamos. En casa, en cambio, andamos un poco más... En casa, más que presionar bien nos está faltando otras cosas, nos cuesta más crear que destruir», admitió sus sensaciones. Por eso la imagen dada en Mestalla «nos hizo recuperar sensaciones, sin olvidar que cometimos errores que penalizan. Pero me reafirmo en ese estilo». Jugar y ganar, suena a programa televisivo, pero es lo que buscan hoy en San Mamés los leones. Enfrente, un Sevilla cuyo técnico Eduardo Berizzo dijo ayer esperar «un partido duro, un rival siempre sólido y más aún en su casa, en un gran estadio y con un gran ambiente. Un equipo intenso, que imprime fortaleza física llevada al balón y a los desplazamientos. Los balones aéreos serán un problema a resolver y será un partido lindo de jugar. Tendremos que ir hacia arriba, imprimir verticalidad y a esa posesión y control del balón, darle daño».J.V.