Baskonia sobrevive frente a la tela de araña del Khimki (83-79)

¡Para haberse matado! Kirolbet Baskonia ha sumado la octava victoria, pero por momentos parecía que se iba a escapar. Pese a dominar el rebote y jugar más en equipo, el Khimki ha puesto una trla de araña en la que ha caído de lleno durante mucho tiempo el cuadro gasteiztarra. Extraños héroes como Polonara y Fall han mantenido con vida al Baskonia y Shavon shields y Pierria Henry han rematado el partido, que pese a todo bien ha podido caer del lado ruso.

Poco más se le puede pedir al arranque baskonista, obligando a Rimas Kurtinaitis a pedir tiempo muerto con 8-3 en el marcador. Cuatro tiros libres sin fallo, una buena asistencia de Janning para Micheal Eric y una contra culminada con mate del propio Eric –ante el nulo balance defensivo moscovita– ha sido suficiente para poner de los nervios al técnico lituano.

Pero lo cierto es que el parón ha beneficiado claramente al cuadro ruso, pese al horroroso inicio lanzador de un Shved helado. en su lugar, empero, Jerebko se ha bastado para igualar el marcador en un abrir y cerrar de ojos, al tiempo que una jugada desgraciada ha culminado con Pierria Henry con el pómulo tocado, y atendido por los servicios médicos del Baskonia, por lo que Sergi García ha tenido que saltar a la cancha.

Todas las rarezas del mundo han acaecido en el este primer asalto, que ha terminado 27-25 para los gasteiztarras, pero sin continuidad ni defensa, ni guarda del rebote defensivo por parte de ambos equipos. Y por raro que parezca, casi sin triples.

Tampoco es que la reanudación haya sido mucho mejor. El descanso de Shengelia lo ha acabado notando el cuadro baskonista, que ha debido parar el partido con 29-33 en contra, después de que Karasev haya suplido a Shved de la mejor manera: atinando sus dos primeros triples. Dentro de lo malo, Pierria Henry ha regresado al partido, aunque le ha costado darle algo de ritmo al juego colectivo. Mientras, el Khimki, con aciertos e irregual como él solo, ha demostrado que de cuando en cuando también sabe jugar colectivo.

En un encuentro sin ritmo, los de Kurtinaitis se han ido cinco puntos arriba, con el añadido de que Fall y Micheal Eric se han cargado de personales, no quedándole otra a Dusko Ivanovic que meter a Ilimane Diop. Y de hecho, el único triple del Baskonia en toda la primera mitad ha sido obra del gasteiztarra de Dakar, que junto con el arranque anotador de Shavon Shields ha servido para que los de Ivanovic hayan tomado la delantera.

Otro de los aliados del baskonia, una vez más, ha sido Alexey Shved. La estrella del Khimki se ha empecinado en ser él quien se las jugara y el juego coral de los de Kurtinaitis se ha perdido por el sumidero, pese a su acierto puntual o de jugadas sueltas como una asistencia tremenda de Jerebko a Booker. Pero al final, con una insultante superioridad gasteiztarra en el rebote, Kirolbet Baskonia ha conseguido alcanzar el descanso ganando por 47-44.

Cuestión de parciales

Un parcial de 0-8 del Khimki ha obligado a Ivanovic a llamar al orden a los suyos. Después de una desacertada primera mitad, Janins Timma se ha encontrado con el acierto nada más empezar la segunda mitad, mientras que en el bando baskonista Nik Stauskas ha vivido un calvario de malas jugadas, con dos faltas tontas, unos pasos de salida y un mate fallado cuando ya estaba dentro. Y con 47-52, el Baskonia se ha tenido que ganar una ración de bronca para despertar.

Pero ni así. Ni con los rebotes y la garra de Polonara, ni sacando ventaja –cada vez– cuando Fall ha podido recibir en el poste bajo, ni con los triples de Shields. Este tercer cuarto ha conseguido que los de Kurtinaitis hayan tomado la iniciativa en el marcador, aunque solo sea por 61-63, de cara a los minutos de la verdad, frente a un rival cada vez más incómodo y que ha incurrido en errores técnicos, viéndose con un adverso 65-71 ya bien dentro del último cuarto.

Y ahí, tras un tiempo muerto, Ivanovic se la ha jugado con un quinteto compuesto por Henry, Stauskas, Shields, Polonara y Fall, y el invento le ha salido perfecto. Esta vez el parcial ha sido local, con un 7-0 que ha devuelto la ventaja en el macador y encendiento a los 11.739 espectadores. Y además, Timma se ha ido a la calle con su quinta falta y Evans se ha retirado lesionado.

Nada podía salir mal, y ni ante las canastas de Shved y Karasev se ha detenido el Baskonia, adelantándose 80-76 a poco más de un minuto para el final después de una gran penetración de stauskas y un matazo de Fall a pase de Pierria Henry. Un nuevo triple de Shved le ha dado vida al Khimki, pero en el momento clave, los tiros libres baskonistas han hecho justicia. Aunque, eso sí, la defensa gasteiztarra deberá mejorar mucho, porque no todos sus rivales van a ser tan benévolos como el conjunto moscovita.

JUEVES: Ser local es una ventaja

La mayoría ha sufrido más de la cuenta, pero todos los equipos locales: CSKA de Moscñu, Zenit de San petersburgo, Bayern de Múnich y Barça, han hecho valer su condición de local para sacar una vigésimo primera jornada repleta de emoción y que deja a Zalgiris Kaunas como colista en solitario y la octava plaza a dos victoria del Baskonia.

CSKA MOSCÚ 81 - VALENCIA BASKET 70

Inofensivo partido que ha podido llevarse con comodidad el cuasdro moscovita ante un Valencia Basket digno, pero que jamás ha tenido opciones de asaltar el Megasport Arena. Las bajas de Abalde y Loyd le han mucho daño al conjunto taronja, que ha firmado un pobre 8 de 29 en el lanzamiento triple. Van Rossom, con 16 tantos, ha sido el mejor de los entrenados por Jaume Ponsarnau, junto con Dubljevic. Aunque el duelo se ha mantenido igualado en apariencia tras 30 minutos –60-56 al final del tercer cuarto–, lo cierto es que el CSKA de Moscú ha dominado el encuentro. Johannes Voigtmann, perfecto en sus cinco triples –14 de 22 para los rusos desde más allá de los 6,75 metros–, ha destacado con 19 tantos y 10 rebotes. sorprendetemente, Mike James se ha quedado en los 14 puntos, con una carta de tiro de 3 de 10 en tiros de campo, pero ha sabido repartir juego para, con un parcial de 21-14 en el último cuarto, afianzarse en el tercer lugar de la Euroliga, igualado con el Real Madrid con 15 victorias, aunque con un partido más.

ZENIT SAN PETERSBURGO 91 - OLYMPIACOS 87

El Sibur Arena ha sido testigo de la penúltima exhibición de Vassilis Spanoulis, autor de 31 puntos y 7 asistencias en la derrota de la escuadra del Pireo frente al Zenit, el cual suma ya su séptima victoria. El problema de los helenos es que los entrenados por Georgios Bartzokas solo han tenido cinco anotadores distintos. A los 31 de «Kill Bill», Printzeis y Papanikolau le han añadido 20 cada uno, más 9 de Milutinov y 7 de Vezenkov, he ahí el bagaje anotador de Olympiacos, que se queda con ocho victorias, sin poder arrimarse al Top 8. Mientras, los de Joan Plaza, pese a la ausencia de Ponitka, han sobrevivido merced al juego coral. Primero, por el tremendo partido de Voronov, autor de 21 tantos, más los 15 de Gustavo Ayón. Además, Colton Iverson ha sido el amo de los rebotes, Albicy ha repartido 8 asistencias y Will Thomas ha estado al quite a la hora de aportar desde la línea de tiros libres.

Y además, la escuadra rusa ha hecho una demostración de carácter cuando Olypiacos se ha acercado 76-74 a flata de tres minutos. Los de Joan Plaza han encadenado un parcial de 8-0, fruto de un «dos más uno» de Renfroe, un triple de Hollins y dos tiros libres de Will Thomas. Ese parcial ha sido el colchón que precisaba el Zenit para asegurarse su tercer triunfo como local, ganándole además el average particular a la escuadra del Pireo –nunca se sabe–, al batirlo en los dos partidos.

BAYERN MÚNICH 80 - MACCABI 68

el Bayern de Múnich pierde su condición de colista, sumando su séptimo triunfo y dejando a Zalgiris en solitario con las seis victorias, ante un Maccabi que recién ha confirmado el fichaje del ex de la NBA Amare Stoudemire. Pero en esta ocasión, los de Ioannis Sfairopoulos han abusado del triple, firmando un 11 de 34, pero sin que nadie pudiera destacar, mientras que Zipzer y Djedovic sí que lo han hecho en el bando bávaro, con un último parcial de 23-15 clave en el desenlace del partido.

BARCELONA 86 - ESTRELLA ROJA 82

El Barça ha sufrido mucho más de lo que nadie hubiera imaginado, sobre todo porque el Estrella Roja de Belgrado baja muchos enteros lejos de su cancha. Pero ha tenido a la escuadra culé contra las cuerdas, pero los 25 puntos de Mirotic, en un último parcial de 24-16 ha decantado el partido para los inquilinos del Palau, que siguen en la parte alta de la Euroliga.