Bidasoa-Irun queda eliminado de la Velux Champions League con las botas bien puestas
Los guipuzcoanos ganan el encuentro de vuelta ante el Wisla Plock polaco (24-19), pero no es el resultado suficiente para lograr el billete para la siguiente fase europea. Dicen adiós a la Champions con solo dos derrotas en 12 encuentros.
You have run out of clicks
«Orain lo egiteko ordua da… Bihar, amets egitekoa. Se acerca la hora de dormir… Mañana, la de soñar». Con estas optimistas frases arengaba el club guipuzcoano a sus aficionados en sus redes sociales en la previa del vital encuentro de la Velux Champions League de este sábado. Pero se acabó la aventura del Bidasoa-Irun en Europa. Y no será por no haberlo intentado.
Los irundarras tenían que remontar los siete goles de la ida y el inicio de la segunda parte ha dado alas a los locales, pasando del 10-12 en contra del descanso al 14-12 a favor. Sin embargo, las opciones han ido diluyéndose con el paso de los minutos y los de Jacobo Cuétara no han podido concluir la gesta.
Bidasoa-Irun ha comenzado el encuentro como tenía que hacerlo: con muchísima intensidad en defensa. Tanto, que para el segundo 37 Kauldi Odriozola ya ha sido excluido dos minutos.
Ha sido la tónica de los primeros 10-15 minutos. De hecho, en la primera parte se han contabilizado ocho exclusiones –4 exclusiones en 6 minutos– y el juego se ha ido calentando por momentos, como el medo rifirrafe que han mantenido Esteban Salinas y el veterano Renato Sulic, de 41 años, cosa que no ha ido a más.
Los guipuzcoanos han ido a remolque durante los primeros 30 minutos, sobre todo debido al 0-3 de parcial del inicio del encuentro. Han logrado neutralizarlo gracias a los goles de Crowley –del exterior con rosquita–, De la Salud –de penalti– y Rodrigo Salinas –un golazo en el aire–.
Xoan Ledo también ha comenzado su recital de paradas hasta que Jacobo Cuétara se ha visto obligado a pedir tiempo muerto después de que los polacos se hayan vuelto a marchar de tres goles (3-6).
Desde ese momento hasta el final de la primera parte los goles han llegado en una y otra portería, pero siempre con el Wisla Plock por delante. Bidasoa-Irun ha tenido una buenísima oportunidad para empatar el encuentro antes del descanso al aprovechar varias pérdidas visitantes. Se ha puesto 10-11, pero Daszek ha marcado el 10-12 tras un error del Bidasoa y Kauldi ha enviado el balón al larguero en la última jugada con un jugador más.
El sueño sigue presente en la segunda parte
La segunda parte ha sido otra cosa distinta. Los irundarras seguían soñando, ¡y vaya si lo han hecho! Han marcado un parcial de 4-0 para ponerse 14-12 en un santiamén. Quedaba tiempo para la remontada.
Sin embargo, el arbiraje ha dejado mucho que desear en ciertos momentos del encuentro, como tras el 17-15, cuando han señalado falta en ataque visitante y han excluído a Rodrigo Salinas por protestar cuando se iba solo porque los colegiados han cortado la jugada. "Manos arriba, esto es un atraco" han comenzado a gritar el público.
En esas, el navarro Niko Mindegia han tomado el control del Wisla Plock y ha sostenido a su equipo (ha marcado los goles que suponían el 17-16 y el 18-17).
A falta de cinco minutos, Renaud-David, de penalti, ha puesto el 21-18, aún lejos de la remontada. Pero en ese momento le han señalado falta en ataque a Mindegia, que se ha lesionado en esa jugada, y todo parecía posible aún.
Los polacos, en cambio, han marcado el 21-19 y han intentado perder tiempo. Con la victoria y el pase ya en la mano, Bidasoa-Irun ha podido acercarse más al reto con los goles de Crowley, Kauldi y De la Salud, pero el tiempo se ha agotado y al Bidasoa-Irun no le ha quedado más remedio que decir adiós a la Champions League.
Esperemos que solo sea hasta la próxima temporada. Del 6 al 8 de marzo, al menos, tiene una bonita oportunidad para lograr billete europeo en la Fase final de la Copa que se disputa en la Caja Mágica de Madrid y donde también estará Anaitasuna.
Triunfo de Bera Bera
La victoria 500 liguera de Super Amara Bera Bera –ante Conservas Orbe BM Porriño por 27-22– no será recordada por su brillantez, pero lo relevante es que el equipo donostiarra sigue firme por la División de Honor y tras un gran inicio ha sabido gestionar la renta ante un voluntarioso Conservas Orbe BM Porriño.
Estos han sido los parciales cada cinco minutos: 4-1, 8-4, 12-6, 14-9, 15-10, 17-12 –descanso- 18-13, 20-14, 21-16, 23-17, 24-21 y 27-22.
Tras este triunfo, Bera Bera y Balonmano Elche, que ganó a Liberbank Gijón el viernes, se disponen a disputar un mano a mano de ocho jornadas para dilucidar la presente Liga.