Olympiacos aguanta y le acaba por infligir una derrota muy cruel a Saski Baskonia (101-102)
Los gasteiztarras han llegado a tener hasta 10 puhtos de renta, merced a la explosión anotadora de Tim Luwawu-Cabarrot, pero las figuras del cuadro heleno han forzado la prórroga. En el tiempo extra, el temple de Williams-Goss ha decidido ante algunas malas decisiones del ataque baskonista.
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SASKI BASKONIA 101 - OLYMPIACOS 102
El baloncesto ha sido injusto con Saski Baskonia anoche. Después del bochornoso tropezón en Girona, Pablo Laso había solicitado compromiso de sus jugadores y sus muchachos han respondido ante nada menos que el líder de la Euroliga, llegando a disponer de hasta diez puntos de renta, fruto sobre todo de un explosivo tercer cuarto de Tim Luwawu-Cabarrot, que metió 17 de sus 25 puntos en ese tercer acto.
Pero no ha sido suficiente. Entre Vezenkov, McKissic y Fournier Olympiacos ha forzado la prórroga, luego de que Moneke haya errado el tiro ganador, y en el tiempo extra Nigel Williams-Goss le ha puesto la puntilla al partido. Y pese a todo, después de un tiro libre errado por el propio Williams-Goss, Moneke ha dispuesto de una segunda prórroga en su mano pero su triple no ha entrado. Ahora bien, puestos a perder, y por más que duela, mejor perder así, con la cabeza bien alta y sin ningún reproche.
Una vez más, a Saski Baskonia le ha pesado el no poder jugar de la mejor manera los últimos minutos, con jugadores como Samanic o Rogkavopoulos sentados tal vez demasiado tiempo en el banquillo. Sea como fuere, el mérito de Olympiacos es el mantenerse fiel a su capacidad de resistencia que tantas y tantas victorias le ha dado a lo largo de todos estos años en la Euroliga. Más allá del talento de sus figuras, que han sido clave para el resultado final, la manera que tienen de no rendirse nunca y no dejarse ir es encomiable, como se ha visto en jugadores como McKissic, capaz de asumir el liderazgo anotador en momentos en los que ni siquiera Vezenkov o Fournier estaban acertados.
Revolución y evolución
Saski Baskonia ha recuperado a Baldwin, aunque no a Howard. Un Baldwin inmerso en un quinteto inicial «revolucionario», en el que Forrest y Baldwin han compartido pista y en el que Khalifa Diop ha tomado la titularidad en detrimento de Donta Hall. El resultado ha sido esperanzador de inicio, con buena circulación de balón y cierta presencia en defensa, aunque a poco que se ha calentado Olympiacos, no ha tardado en adelantarse 7-11 tras un parcial de 0-7, con Moustapha Fall dueño de la pintura, bien asociado con Williams-Goss.
Por fortuna, la entrada de los reservas, en especial Ognjen Jaramaz, le ha venido bien al Baskonia. El base serbio ha frenado la sangría de pérdidas de Forrest y Donta Hall ha encadenado un par de mates para poner al Baskonia por delante al final del primer cuarto, 17-16, en una suerte de declaración de intenciones de que los gasteiztarras han salto con la clara idea de competir el partido ante la escuadra del Pireo. Entre los helenos, Vezenkov, luego de sus 45 puntos al Bayern, ha comenzado más bien frío, aunque no le ha faltado puntos exteriores a Olympiacos, de la mano de Fournier.
Una vez más, Rogkavopoulos se ha erigido como el faro anotador del Baskonia, capaz de responder a los puntos de McKissic y Vildoza en el arranque del segundo asalto. Después de los desastres de las últimas jornadas, este martes los de Pablo Laso han ido ofreciendo una imagen más reconocible de sí mismos, siendo capaces de replicar a cada anotación de Olympiacos. En ese sentido, situar a Kamar Baldwin como escolta a tiempo casi completo y la versatilidad de Samanic y la energía de Luwawu-Cabarrot han sido esenciales para mantener la iniciativa en el marcador, al punto de que los gasteiztarras han abierto rentas de hasta cuatro puntos. Y para postre, el dominio reboteador ha sido muy claro a favor de los gasteiztarras.
La principal pega ha estado en los balones perdidos, ya que el Baskonia ha sumado hasta 10 pérdidas antes del descanso. Sin que quepa definir como «tabla de salvación» del cuadro heleno, pero lo cierto es que ha sabido castigar esos errores en la posesión, sobre todo de la mano de McKissic, que con una contra ha dejado el 42-40 definitivo al término de la primera mitad.
Explosión sin premio
Tim Luwawu-Cabarrot ha jugado sus diez mejores minutos desde que esta en el Baskonia a la salida de los vestuarios. El alero francés ha anotado 17 de los 27 puntos del Baskonia en este tercer acto. Y cuando Luwawu-Cabarrot se ha sentado, Rogkavopoulos se ha sacado un «tres más uno» de la chistera.
Esa explosión ha llegado a poner a Saski Baskonia con diez puntos de renta en varias ocasiones. Sin embargo, un McKissic providencial, más el trabajo en el rebote ofensivo de Vezenkov y Milutinov en este tercer acto han hecho sobrevivir a os pupilos de Bartzokas, que han llegado al final del tercer acto cayendo solo por 69-67.
Una igualdad que ha quedado aún más patente en el último acto. La iniciativa ha sido baskonista en todo el cuarto período, pero no ha terminado de rematar el partido y con 89-87 en el marcador, Olympiacos ha movido el balón con mucha paciencia y McKissic ha sabido encontrar a Moustapha Fall para establecer el empate a 89. Chima Moneke ha tenido el tiro ganador sobre Vezenkov, pero su tiro no ha entrado y no ha habido más remedio que acudir a los cinco minutos extra.

Y en ese tiempo añadido la iniciativa ha cambiado de manos. Saski Baskonia ha sido capaz de igualar casi cada vez, pero de la mano de Nigel Williams-Goss la escuadra del Pireo el peso del juego ha cambiado hacia el bando heleno, en buena medida por las malas decisiones en ataque de los gasteiztarras en ataque. Con 99-101, el propio Williams-Goss ha podido cerrar el partido desde la línea de tiros libres, pero solo ha metido un tiro y Moneke, una vez más, ha tenido la segunda prórroga en su mano. Para su desgracia, el ala-pívot nigeriano tampoco ha atinado y de poco ha servido la canasta en palmeo de Luwawu-Cabarrot. Sin embargo, y aunque la derrota duela mucho, puestos a caer, mejor caer así y no como en Girona.
Ilimane Diop
En otro orden de cosas, La Laguna Tenerife ha anunciado este martes la desvinculación del pívot Ilimane Diop tras su llegada al club hace un año. El equipo lagunero ha emitido un comunicado en el que agradece «la aportación, dedicación y compromiso» del gasteiztarra de Dakar durante su etapa en la entidad.
Ilimane Diop llegó al cuadro aurinegro en enero de 2024 y a lo largo del pasado curso disputó 15 partidos en Liga ACB y otros tantos en la FIBA BCL. Esta campaña el interior ha participado en ocho duelos de competición doméstica y en seis en el torneo europeo, con una relevancia residual, por detrás en la rotación de Georgi Shermadini y Fran Guerra.
Su aportación durante este curso 2024/25 ha sido de 1,8 puntos en algo más de cuatro minutos por choque en la Liga ACB, mientras que en BCL se marcha con una media de 3,8 puntos y 2,2 rebotes en algo más de ocho minutos por partido.
FICHA TÉCNICA:
BASKONIA: Trent Forrest (11), Kamar Baldwin (9), Tim Luwawu-Cabarrot (25), Chima Moneke (10) y Khalifa Diop (2) –quinteto inicial–, Luka Samanic (17), Nikos Rogkavopoulos (14), Donta Hall (11) y Ognjen Jaramaz (2).
OLYMPIACOS: Williams-Goss (19), Fournier (22), Vezenkov (21), Fall (12) y Papanikolau –quinteto inicial–, Luca Vildoza (3), McKissic (22), Milutinov (2), Larentzakis (1) y Peters.
Parciales: 17-16, 25-24, 27-27, 20-22, 12-13.
Árbitros: Javor, Pastusiak y Radojkovic. Han eliminado por faltas a los baskonistas Baldwin y Forrest.
Incidencias: 8.198 espectadores en el Buesa Arena. Disparidad de reacciones para los exbaskonistas Vildoza y Peters: pitos al argentino y aplausos a Peters.