Jone Goirizelaia, Txemi Gorostiza, Sabin Arana e Ibon Cabo
En representación del colectivo Athletic Indartuz

En el Athletic, ¡mañana sol… y buen tiempo!

Hemos necesitado más un mes para asimilar todo lo que sucedió, y no solo lo que se aprobó y cómo se aprobó, en la última Asamblea de socias y socios compromisarios. La organización de la misma fue tan particular, y novedosa, en cuanto a diseño, exposición y duración que requiere por sí misma un análisis detallado y en profundidad. Y aunque no lo vamos a hacer en este momento, si queremos manifestar nuestro desacuerdo con lo sucedido, ya que si el objetivo planificado era cansar a las personas que acudieron para que no participaran, e incluso no votaran, sin duda que lo consiguieron. Los escasos votos recogidos en las diferentes votaciones y la ajustada aprobación de alguno de ellos en horario de madrugada deben conducir a una reflexión de todas y todos, socias y socios, compromisarias y compromisarios asistentes o no y, también, a nuestra actual Junta Directiva. Nuestra idea de participación en las cuestiones de relevancia para nuestro Club, especialmente en una Asamblea Ordinaria, es muy diferente, más respetuosa, accesible, eficaz y, en definitiva, democrática. Por ello, emplazamos a la Junta Directiva a disponer en el futuro de otras formas que garanticen la participación y la transparencia.

Reconocemos la dificultad de organizar una Asamblea Ordinaria de Socias y Socios Compromisarios que supera el millar, así como de mantener permanentemente informados a un número de alrededor de 44.000 socias y socios, pero merece la pena el esfuerzo, pues todas estas personas somos el valor y la identidad del Club, la información que se debe ofrecer es una obligación permanente, escuchar las opiniones es fundamental y adoptar las decisiones es nuestro derecho, obligación y mandato para Presidente y Junta Directiva. En nuestra opinión, estas Asambleas deben servir mucho más para escuchar que para abrumar con informaciones metodológicas, tecnológicas o económicas, que se presentan densas, excesivamente técnicas y poco accesibles en ese escenario. Y, sobre todo, por la dificultad de intervenir desde la tribuna, el temor y miedo escénico tan humano que no merece ser expuesto a crítica y abucheo entre personas que compartimos mucho más de lo que a veces creemos. Por eso, le pedimos a la Junta Directiva que realice dicha escucha activa y atención a las opiniones sociales, la mejore durante todo el año y, especialmente en el desarrollo de la Asamblea.

Una vez manifestado lo anterior, queremos destacar varios asuntos relevantes para la actualidad y futuro de nuestro Club. El Proyecto Athletic Aurrera y Lezama 2030 se presentan como los elementos centrales y más relevantes de la intervención directiva. Pues bien, para las personas que formamos parte de este colectivo de opinión y aportación de ideas para la continua mejora de nuestro Club, Lezama debe seguir siendo el pilar fundamental y motor de identidad, valores y tradicional filosofía deportiva del Athletic Club reflejadas en estos 125 años de historia. Y las actuales dificultades de acceso a partidos y entrenamientos de toda la estructura deportiva formativa, y no sólo de los entrenamientos de los primeros equipos masculino y femenino, son inadmisibles e injustificables en un Club de nuestras características y arraigo social. Las socias y los socios debemos tener acceso libre a las instalaciones deportivas exteriores de nuestro Club en Lezama, tal y como ha sido hasta no hace mucho tiempo, sin problemas destacables, siempre con respeto y con el control necesario ya existente.

Lezama no debe ser definido, únicamente, como un Centro Deportivo de Alto Rendimiento, una referencia mundial y una oportunidad de negocio, aislándolo de la masa social y demás aficionados, como nos lo presenta la actual Junta Directiva, la más técnica, economicista y tecnológica de la reciente historia rojiblanca. Para nosotras y nosotros, Lezama debe reunir todas esas metodologías dirigidas a la mejora constante en formación, progresión deportiva, competitividad y destino a los primeros equipos, sin abandonar su identidad y cercanía con la masa social y con todos los demás aficionados, especialmente niñas y niños. Un lugar donde se vive y se reafirma afición y fidelidad a un equipo, a unas jugadoras y jugadores cercanos, que comunican identidad y compromiso Athletic. Y también un verdadero Berbagune universal, no coyuntural por una campaña publicitaria, donde la comunicación en euskara de nuestras jugadoras y jugadores sea natural, habitual y modélica para nuestras actuales y futuras generaciones de athleticzales.

Por otro lado, no nos parecen acertadas determinadas actuaciones y apoyos de la Junta Directiva con La Liga y sus actuales rectores, sin ningún resultado positivo en cuanto a horarios, televisiones, designaciones arbitrales, asignaciones económicas, etc., mientras los expedientes sancionadores y amenazas a socias y socios se multiplican con ataques a la libertad de expresión propios de un caudillo o cacique de la finca o el balón.

Y todo ello, especialmente, cuando estamos «celebrando» los 125 años del Club, admirados y ejemplo seguido desde muchos lugares por nuestra tradicional filosofía deportiva, como así expresan nuestros Estatutos sociales, por nuestros valores sociales, formativos y saber hacer. Celebrando también un buen trabajo de renovaciones en el primer equipo masculino y femenino. Pero, aun así, nos sorprende la inactividad de la dirección del Club en esta celebración, que está pasando sin pena ni gloria, y ahora se pretende clausurar con un nuevo espectáculo «meramente contemplativo» en San Mames Barria, fiel reflejo de una Junta Directiva donde la participación de las socias y socios no cotiza en bolsa y, en todo caso, prioriza reunir algo más de dinero en caja, auténtica obsesión de estos dirigentes.

En definitiva, después de cada Asamblea, y cada celebración... sol y buen tiempo, como decía aquel, porque así lo han decidido socias y socios, aunque sea de aquella manera. Nuestra recomendación es que no conviertan el máximo órgano decisorio del Club en un cónclave o en una reunión papal donde hasta que no sale el humo blanco pretendido no se mueve nadie. Quizás están provocando la reacción e impugnación de todo ello.

Athletic Indartuz seguirá caminando, y seguiremos esperando ser oídos.

Search