El presente inútil
Los comentarios periodísticos son la antítesis de la ciencia histórica. Los cambios desenfrenados en tiempo humano, son de lo más equívoco que pueda suceder. Las revoluciones: como la Revolución Francesa, la Comuna de París, la Revolución Rusa, han quedado en retazos dispersos de lo que se buscaba y proponía. Los que siguen insistiendo en un progreso lineal de la humanidad en realidad viven en un ensueño. La política exterior en la actualidad en USA, puede quedar en nada en muy poco tiempo, cuatro años es una deriva minúscula y nunca se sabe si Trump, se atragantará comiendo ciruelas, o le volverán a tirotear. Los regicidios en la historia de la humanidad son ingentes por todos lados, y en todas las épocas. Todo está en el aire, así que las certezas periodísticas son inútiles. El periodismo debería limitarse en explicar lo que acontece. Los análisis en todos los medios son enjabonamientos de lo que editorial desea. Si se analiza lo que acontece por medio del crono, su resultado debe ser la exigencia del lado donde te toca, y si se sale del guion, la invisibilidad se convierte en una realidad tangible. Lo que es una evidencia es que en el momento que terminó la guerra del 45 del siglo pasado, el campo de fuerza estaba muy bien dibujado, por un lado, los occidentales, por el otro, los del este, y un tercero por parte de los no alineados. Era muy fácil el discurso propagandístico según el ángulo de mira, que se escogía. La creación de la OTAN, fue un elemento central en la política del mundo de la libertad y de la democracia infinita, con un liderazgo empresarial por parte de los americanos. La situación actual ha variado en la geopolítica, respecto a la época anterior. El comunismo europeo, fruto de sus grandes éxitos, murió de muerte natural, que produjo un cambio en las relaciones entre los Estados del continente. El surgimiento de Asia, con una China factoría del planeta, también es una novedad que no se debe olvidar. Por ello las potencias de segundo nivel como la Federación Rusa, con su correspondiente bagaje histórico y cultural, dispone de una irradiación por mucho que moleste a Europa, la demócrata y la de las libertades sin parangón, se la tiene que tener en cuenta y convertirla en enemigo es un error mayúsculo. Desconozco si esta premisa es una antema que te lleva directamente a la hoguera por la maldad del razonamiento. Ahora no está de moda el ser neutral, ya que como el pensamiento es tan líquido y viscoso, no hay manera de solidificar nada, toda la verdad es polvo que molesta a la mirada y así estamos, la ligereza se trasforma en idiotez. Lo mejor es ir en contra del estado social, y convertir Europa, en una Esparta guerrera y militarista. Es lo contrapuesto de los que piensan que la virtud inunda los corazones de forma lineal y progresiva.
Atentamente.