¿De dónde viniste, Silva?
Con esa zurda de seda, que funciona con la precisión de las agujas de un reloj suizo, que encuentras espacios para tus compañeros solamente visibles para ti, que haces mejores a todos los jugadores que te rodean y que has coadyuvado decisivamente desde que llegaste a Donostia a que la Real Sociedad haya conseguido el sueño de participar tres temporadas consecutivas en la Europa League.
Ahora, David, toca la Champions.
Epílogo: Y además de impartir tu magisterio jornada tras jornada, una persona que hace de la sencillez, seriedad y discreción, una filosofía de vida.
Has renovado, o estás a punto de hacerlo, por una temporada más. Los seguidores realistas nos hallamos, más que encantados, obnubilados.
Eskerrik asko, David.