Soy una madre incapaz de comprender qué está pasando con el sistema educativo. Mi hijo de tres años comienza el curso que viene 2º de infantil en la Escuela Pública Sanduzelai. Actualmente hay dos aulas para este curso y hay 27 niños matriculados.

Inexplicamente cierran un aula, incumpliendo sus ratios de 26 niños máximo por clase y quieren encajar a 27 niños de 4 años en un aula de 50 m2. No puedo comprender que en una escuela pública se cierren aulas habiendo niños suficientes para ocuparlas y se permita que estas se llenen de polvo en lugar de inundarse de risas y juegos.

Desde estas líneas apelo al sentido común y a la responsabilidad, o al menos a la legalidad y se cumplan los ratios de 26 niños por aula. Debemos apostar por una educación de calidad, ya que estos niños forman parte de nuestro futuro. Por último, no puedo evitar preguntarme si pasaría lo mismo de no tratarse del modelo D.