Apenas siete horas después de la toma de posesión del nuevo gobierno de “Ahora Madrid”, alguien buscó entre los 50.000 tuits de Guillermo Zapata, publicados entre 2008 y 2009. Su contenido, con referencias a chistes antisemitas o a víctimas de ETA, provocaron un escándalo político y mediático y  partidos políticos como PP, PSOE y Ciudadanos, exigieron inmediatamente dimisiones. Zapata, uno de los fundadores de “Ganemos”, pidió perdón y advirtió que los chistes siempre ilustran otras cosas más allá de lo que digan literalmente. “Un chiste –dijo– no tiene por qué ser una opinión…“. Guillermo Zapata no es racista ni xenófobo ni antisemita. Algo que sí son muchos miembros del PP. Los que nunca han consentido en cambiar el nombre de las calles que consagran nuestro genocidio. “Los que han impedido que el pleno del Congreso condene el golpe de julio de 1936”. En este sentido, compara esos mensajes con declaraciones de dirigentes del PP como Pablo Casado, que se pronunció así en un congreso del partido: "Los de izquierdas son unos carcas, todo el día con la fosa de no sé quién". Rafael Hernando, sobre las víctimas del franquismo: “Algunos se han acordado de sus padres, parece ser, cuando había subvenciones  para encontrarlo”. Lo preocupante es que el portavoz del PP, sí cree “que el lugar de los republicanos asesinados por Franco son las cunetas de España”.

Ejemplarizante también la actuación del Gobierno de Israel... “La ONU ve crímenes de guerra de Israel en Gaza”...