Romper vetos amplía y enriquece la política

Anteayer se conocieron sendos acuerdos presupuestarios firmados por EH Bildu con el Ejecutivo de Nafarroa y con el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Irun. En ambos casos, se trata de ejecutivos liderados por el PSOE y la coincidencia en el tiempo ha hecho que se desaten las especulaciones sobre el posible alcance de estos pactos presupuestarios. En cualquier caso, tampoco se trata de algo tan novedoso. Conviene recordar que EH Bildu posibilitó la aprobación de los presupuestos forales durante toda la anterior legislatura en Nafarroa. Por otra parte, no es la primera vez que con su abstención permite que salgan adelante las cuentas en el Consistorio de Irun.

Más allá del alcance que puedan tener en el futuro, esos acuerdos ponen de manifiesto dos cuestiones de gran importancia en estos tiempos de palabras gruesas, agitación y ruido. Por un lado, el valor que tienen el diálogo y la negociación como instrumentos de acción política. El abandono de vetos abre la posibilidad de diálogo a todos los actores políticos involucrados y propicia que se puedan  acordar e impulsar políticas diferentes. De este modo, se amplía el campo de lo posible y se enriquece el ámbito de la acción política. Gana la política, pero también gana la sociedad. Por otro lado, la apuesta de EH Bildu por dar prioridad a resolver cuestiones concretas, a tratar de mejorar las condiciones de vida de la gente, se ha traducido en un límite de gasto más elevado en Nafarroa, así como en una ampliación de los créditos dirigidos a realizar inversiones sociales en los presupuestos de las citadas instituciones, lo que sin duda reducirá las desigualdades y redundará en beneficio de toda la ciudadanía.

Las minorías suelen construir su poder sobre vetos que obstaculizan la formación de mayorías alternativas que les puedan arrebatar el poder. Actuar con valentía para superar esos vetos abre la política a nuevas posibilidades, más acordes a los valores sociales mayoritarios

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