«Por el momento, el Tour se mantiene en sus fechas. Naturalmente, todo dependerá de la evolución de la pandemia», ha afirmado Prudhomme al diario "La Montagne".
«Sólo deseo una cosa: que el Tour se desarrolle este verano. Pero no por el Tour, sino porque, si no se disputa, será porque estemos en una situación catastrófica", ha añadido.
Prudhomme, que hace unas semanas recordaba que sólo las dos Guerras Mundiales habían impedido que se disputara el Tour, reconoce que están estudiando «otras hipótesis sobre las fechas» para el caso de que la situación sanitaria impida que se desarrolle en las fechas previstas.
Pero se muestra tajante al indicar que no se hará sin público, en contra de lo que había afirmado hace unos días la ministra francesa de Deportes, Roxana Maracineanu, que dejó abierta la puerta a un Tour sin aficionados.
La organización del Tour mantiene por el momento las fechas actuales, aunque en función de la situación tomará una decisión antes del próximo 15 de mayo.
Numerosas pruebas han ido anulándose durante estas semanas, la última la Dauphiné, que lo ha hecho este mismo miércoles.