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La última

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El sábado pasado fuimos a la carrera del barrio de Arriaran en Beasain. Yo iba a hacer la carrera trail de 11km y nuestra hija se animó a hacer la de los niños:

- Antes de irnos, me dijo: "Ama, yo empezaré a correr a los 9 años, ¡no como tú que empezaste a los 40!" Qué alegría me dio. No quiero que haga como yo, que he estado 40 años sin hacer deporte.

AZKENA

Ver: Haur baten etorkizuna nola zapuztu.

Y: La lección que nos dio nuestra hija..

No pude ver la salida de su carrera, y ya que se acercaba la hora de la nuestra me llegó la hora de calentar. Mientras esperaba a ver si ella terminaba la carrera, vi como llegaba el último niño y detrás de él la escoba... y ni rastro de mi hija....

En ese momento me preocupé, podía ser que a última hora hubiera decidido no salir... pero era raro. La organización dio la salida a la siguiente carrera y fue cuando la vi, venía a su ritmo, con cara de preocupación, con su dorsal correspondiente...se olvidaron de ella, era la última. En ese momento algo dentro de mi hizo 'krak'. Me puse a su lado y cruzamos la meta juntas.

Nuestra carrera comenzó a los 20 minutos. Salí a mi ritmo, me sentía fuerte y estaba disfrutando la carrera. Normalmente suelo ir en el último grupo y esta vez también, solo tenía a 5 o 6 personas detrás de mí. Disfruté durante todo el recorrido y decidí parar cuando estaba a 300 metros de la meta. Dejé pasar a todas las personas que venían detrás de mí. Mi hija me esperaba a escasos metros de la meta. Cuando me vio me dijo: "¡Ama, vas la última!", y añadió, "¡nunca has sido la última!". ‘Sí’, le dije, yo en alguna carrera he sido la última, pero he logrado terminarla y lo mejor, disfrutándola. Le pregunté a ver si quería cruzar conmigo la meta y con una sonrisa, me agarró de la mano y corrimos a cruzar el arco.

Alguien debe ser el/la último/a, y la única persona que no puede llegar en este puesto es la que no lo intenta

 

*Gracias Juan, por las correcciones en el texto (juanbezosmindfulness.com)