Este verano, el Ciclo de Jóvenes Intérpretes de la Quincena Musical mostrará la diversidad y calidad de cinco conjuntos surgidos de las aulas de Musikene, y que además apuestan por mezclar en sus conciertos tradición y modernidad. Dará comienzo esta misma tarde con un recital a solo del pianista gallego Xabier Boixet, que pese a su juventud ya ha obtenido premios en concursos de Bilbao, Lleida e Italia. Para su debut en la Quincena Musical, ha escogido un programa que atraviesa diversos periodos de la literatura pianística: el Clasicismo de Joseph Haydn (‘Sonata n.º 62’) y Ludwig van Beethoven (‘Andante favor’), el Romanticismo de Johannes Brahms, (‘Scherzo, op. 4’), el impresionismo de Claude Debussy (‘Masques’, ‘D’un cahier d’esquisses’ y ‘L’isle joyeuse’), así como los inicios de la vanguardia de la segunda mitad del siglo XX con los ‘Cuatro estudios de ritmo’ de Olivier Messiaen.

Mañana martes, el conjunto Oxygen Quartet, formado por cuatro alumnos de saxofón de Musikene, demostrará por qué el cuarteto de saxofones es una de las agrupaciones camerísticas más pujantes de los últimos años. Para su presentación en la Quincena Musical, han buscado un equilibrio entre el repertorio clásico transcrito para saxofones y nuevas obras creadas específicamente para su cuarteto instrumental. Comenzarán con tres transcripciones: una de la popular página coral ‘Northern lights’ de Ola Gjeilo, otra del ‘Cuarteto de cuerdas n.º 12, ‘Americano’’ de Antonin Dvorak, y ‘Sevilla’, de la ‘Suite española’ de Isaac Albéniz; y, acto seguido, presentarán una de las páginas contemporáneas para cuarteto de saxofones más conocidas: ‘Ciudades’, de Guillermo Lago (seudónimo de Willem van Merwijken), en la que este compositor neerlandés plasmó en música los recuerdos de su paso por ciudades como Córdoba, Sarajevo, Colonia o Montevideo. El Oxygen Quartet finalizará su actuación con un tango de Astor Piazzolla, ‘Café 1930’.      

Como continuación natural del anterior, el tercer concierto del Ciclo lo protagonizará, el miércoles, el Quinteto Piazzokene, un grupo de reciente creación que busca aportar un punto de vista novedoso al repertorio camerístico, usando precisamente la música de Astor Piazzolla como nexo entre lo clásico y lo moderno, lo popular y lo académico. Compuesto por Irene Rosado (violín), Manuel Perpén (guitarra eléctrica), Henar F. Clavel (piano), Mateo López (contrabajo) y Gabriel Domínguez (acordeón), abordarán un programa vertebrado en torno a las ‘Cuatro estaciones porteñas’ del maestro argentino del tango, quien escribió este ciclo inspirado en Vivaldi entre 1965 y 1970. Entre cada una de las estaciones de Piazzolla, el quinteto intercalará tangos de reciente creación de compositores contemporáneos, como los ‘Tres tangos’ del finlandés Kalevi Aho, ‘Quinteto nuevo’ del polaco Mikolaj Majkusiak, y el estreno absoluto de una nueva obra del joven compositor Guillermo de la Torre Rivero, alumno de Composición en Musikene.   

El jueves será el turno del clarinetista David Berenguer, acompañado al piano por la profesora de Musikene Amaia Zipitria. Juntos defenderán un programa titulado ‘América, de norte a sur’, con el que darán un repaso a la música para clarinete escrita por compositores estadounidenses como George Gershwin (‘Three preludes’), Leonard Bernstein (‘Sonata para clarinete’) o Aaron Copland (‘Concierto para clarinete’), junto a autores latinoamericanos que también prestaron especial atención al instrumento, como el argentino Carlos Guastavino en su virtuosa ‘Sonata para clarinete’ de 1970.

El ciclo llegará a su fin el viernes 22 de agosto con un programa del Trío Skala dedicado al Romanticismo francés y alemán. Formado por Alejandra Cortijo (flauta), Marcela Galindo (fagot) y Claudia Manzano (piano), el trío dará muestra de la gran flexibilidad que poseen los instrumentos de viento madera, ya que interpretarán una partitura específicamente compuesta para dicha agrupación, el ’Trío WoO 37’ de Ludwig van Beethoven, y otras dos obras adaptadas para ajustarse a dicho formato, como son el ‘Trío para piano, violín y violonchelo’ de Claude Debussy y el ‘Trío para piano, flauta y violonchelo, op. 63’ de Carl Maria von Weber.