7K - zazpika astekaria
CONSUMO

Reclamaciones veraniegas


Verano, vacaciones, viajes, temporada ideal de ocio y relax, unas circunstancias en las que nos volvemos más flexibles. Tal es así que incluso hay quien perdona “con resignación” los abusos de hoteleros, hosteleros, transportes, etc. Son errores que cometemos, y en parte por nuestro desconocimiento de que, incluso, en vacaciones seguimos teniendo derechos.

Otro error muy común es pensar que, si viajamos fuera de nuestro territorio, no podemos reclamar, pero no es así porque, aunque cambien el idioma o las leyes locales, en la Unión Europea los derechos como personas consumidoras están garantizados. Todas las empresas que comercializan bienes o servicios de consumo están obligadas a disponer de Hojas de Reclamaciones y este suele ser el primer paso para dejar constancia por escrito de nuestra queja y poder reclamar en nuestro territorio, aunque el problema haya ocurrido fuera.

Para poder reclamar es necesario que nos dotemos de documentación, ya que la carga probatoria es nuestra. Por ejemplo, fotos, correos electrónicos, facturas, folletos publicitarios, o también capturas de pantalla si hemos contratado por internet, pues todos serán datos necesarios para nuestra defensa. No hay que desistir, aunque nuestra reclamación sea de poca monta, o por no “complicarnos la vida”. Pensemos que lo que hoy es una pequeña cantidad, mañana puede ser una práctica generalizada que afecta a muchas más personas.

Dos recomendaciones finales: Por un lado, hay que buscar plataformas, agencias de viajes, apartamentos que sean fiables y con buenas referencias y, antes de contratar, leer bien las condiciones. Ante cualquier duda, pedir aclaraciones. Y, por otro, en caso de una mala experiencia, se debe acudir a una asociación de consumidores que ayudará a gestionar nuestra reclamación y evitará que nos mareen.