16 NOV. 2025 IRUDITAN Hofmann y el LSD (Archivo Bettmann Getty Images) Jone Buruzko {{^data.noClicksRemaining}} Para leer este artículo regístrate gratis o suscríbete ¿Ya estás registrado o suscrito? Iniciar sesión REGÍSTRARME PARA LEER {{/data.noClicksRemaining}} {{#data.noClicksRemaining}} Se te han agotado los clicks Suscríbete {{/data.noClicksRemaining}} Tal día como hoy, el 16 de noviembre de 1938, Albert Hofmann dio el primer paso para sintetizar el LSD, una de las drogas alucinógenas más consumidas por los movimientos contraculturales en la década de los 60. Hofmann, doctorado en Filosofía por la Universidad de Zúrich, pasó a la historia, sin embargo, por sus descubrimientos químicos. En 1929 comenzó a trabajar en los laboratorios Sandoz (actualmente Novartis). Allí, Hofmann pretendía utilizar productos naturales para fármacos, así que empezó estudiando el hongo del cornezuelo. En 1942, cinco años después de sus primeros intentos y de forma accidental, se convirtió en la primera persona que no solo sintetizó, sino que ingirió y experimentó los efectos del LSD. Decidió entonces ir más a fondo, así que aumentó la dosis mientras se asustaba o medio disfrutaba, dependiendo del momento, de unas sensaciones cuando menos extrañas mientras veía girar los muebles y su cerebro se inundaba de colores intensos. El químico suizo llegó a admitir que la dietilamida de ácido lisérgico, también conocida como LSD-25, tripi o simplemente ácido, «es una sustancia psicodélica que tiene un valor extraordinario cuando se utiliza en psicoanálisis y psicoterapia pero que, cuando la consumen los jóvenes de hoy en día, es como poner una bomba atómica en manos de aficionados». Ilegalizada desde los años 60, hay quien apuesta por su uso terapéutico y, en el país de su descubridor, Suiza, hasta se han autorizado investigaciones dirigidas a estudiar su efectividad como medicamento. Hofmann, que lo consideró siempre uno de sus grandes descubrimientos, falleció en 2008 con 102 años.