22 DIC. 2024 CONSUMO Comer en restaurantes BERTA GARCíA Cada vez es más frecuente celebrar comidas y cenas navideñas fuera del hogar. Suponen un costo extra a los ya abultados gastos navideños, pero a mucha gente le resulta menos engorroso que comprar, cocinar y fregar. Siempre convienen algunas recomendaciones a tener en cuenta. Por ejemplo, si se va a realizar una reserva en un restaurante, esta no puede suponer un coste añadido o suplementario al precio final por lo que se haya consumido, pues dicha cantidad tiene que descontarse del precio final que se deba abonar. Sin embargo, es legal que, en caso de anular o no acudir al evento, el restaurante retenga la cantidad adelantada por los perjuicios económicos que le suponga. En la carta, todos los precios tienen que aparecer completos, incluyendo todos los impuestos (IVA). Para los productos fuera de carta o cualquier otro, el establecimiento debe informar a los clientes de forma previa, clara y visible sobre sus precios. No se puede cobrar ninguna cantidad por cubierto o por servicio porque, tanto el servicio como el cubierto, son inherentes a la prestación que se realiza por el establecimiento. Otra cosa es que en la carta se especifique el cobro por comensal del pan o similares (aunque no es habitual que se cobre). Se debe rechazar toda bebida ofrecida a granel en frascos, jarras o botellas que no estén oportunamente etiquetadas y que, por lo tanto, puedan ser rellenadas o trasvasadas, ya que es la única forma de tener suficientes garantías de seguridad alimentaria y de conocimiento de la trazabilidad de dicha bebida. Incluso en caso de que el restaurante invite a un chupito “cortesía de la casa”. La utilización de un código QR, aunque muy utilizado para exponer la lista de comidas y bebidas y sus precios, debe ser considerado como complementario a otros medios (carta en papel, pizarra, murales...).