26 ABR. 2015 CINE «Snowden» MIKEL INSAUSTI {{^data.noClicksRemaining}} Para leer este artículo regístrate gratis o suscríbete ¿Ya estás registrado o suscrito? Iniciar sesión REGÍSTRARME PARA LEER {{/data.noClicksRemaining}} {{#data.noClicksRemaining}} Se te han agotado los clicks Suscríbete {{/data.noClicksRemaining}} La película de Laura Poitras “Citizenfour”, ganadora del Oscar y del Bafta al Mejor Documental de 2014, está teniendo una excelente acogida en las salas comerciales de cine, compitiendo de tú a tú con grandes producciones de ficción. Se centra en las filtraciones hechas por el analista Edward Snowden sobre la vigilancia masiva llevada a cabo por la Administración Obama, dentro de la beligerante estrategia política de máxima seguridad promovida y reforzada a raíz de los atentados del 11-S, que siguen sirviendo de pretexto para justificarlo absolutamente todo. Oliver Stone ha querido servirse del clima favorable creado entre el público cinematográfico para rodar y estrenar acto seguido una versión de ficción de los hechos con un sentido más amplio, ya que lo contado en “Citizenfour” por Laura Poitras, el periodista Glenn Greenwald y el propio Edward Snowden se integra dentro de un biopic que recoge la vida del analista, desde su etapa militar, pasando por su trabajo en la NSA (Agencia Nacional de Seguridad), hasta desembocar en su obligado exilio en Hong Kong y el posterior periplo vía Moscú en búsqueda de protección diplomática y legal en distintas embajadas a la manera de Julian Assange. “Snowden”, que se estrenará las próximas Navidades y ha contado con un presupuesto de 45 millones de dólares, va a ser fiel al esquema narrativo de los otros biopics realizados previamente por Oliver Stone. El cineasta suele conceder una importancia vital al trabajo previo de la selección del reparto, dando con actores y actrices que guarden un parecido razonable con los personajes reales, más aún teniendo en cuenta que se trata en este caso de figuras muy recientes conocidas a través de los medios. En tal sentido, no se espera que varíe mucho con respecto a su conocida trilogía histórica de Vietnam, conformada por “Platoon” (1986), “Nacido el 4 de julio” (1989) y “El cielo y la tierra” (1993). Es una forma de hacer cine que fue ensayando a partir de “Salvador” (1986), primando siempre la coralidad, incluso cuando se ha fijado, como en “Snowden”, en personalidades concretas, alrededor de las cuales giran el resto. Por lo tanto, habrá que pensar más directamente en la trilogía presidencial compuesta por “J.F.K.” (1991), “Nixon” (1995) y “W.” (2008). Con este tercer título, la fórmula pareció agotarse, pero Stone vuelve a insistir ahora en ella. Curiosamente, al entrar en la fase más discutida de su carrera, Oliver Stone hizo el film patriótico “World Trade Center” (2006), concebido como un homenaje a las víctimas del 11-S. Casi diez años después, va a tener la oportunidad de ser más crítico con la peligrosa paranoia generada por aquellos acontecimientos, que han acabado revirtiendo en el endurecimiento de la política exterior estadounidense durante el mandato de Obama. La lectura que hace de la recrudecida situación junto al guionista Kieran Fitzgerald surge de la adaptación de los libros “The Snowden Files”, de Luke Harding, y “Time of the Octopus”, de Anatoly Kucherena, con lo que ha preferido utilizar fuentes externas al protagonista. Para encarnar a Edward Snowden, la elección ha sido Joseph Gordon-Levitt, uno de los jóvenes actores con mayor capacidad de transformación. El papel de la documentalista Laura Poitras recae sobre Melissa Leo, mientras que del periodista Glenn Greenwald hace Zachary Quinto. La novia de Snowden, llamada Lindsay Mills, tiene el rostro de Shailene Woodley, por lo que sus fans adolescentes querrán ir a verla en esta película tan alejada de lo que venía haciendo. El veterano actor inglés Tom Wilkinson se pone en la piel de otro periodista importante en el caso, como es Ewan Macaskill, del diario “The Guardian”. Entre el grueso de agentes de la NSA, la CIA y demás funcionarios, nos encontramos con Scott Eastwood, Timothy Olyphant, Nicolas Cage, Rhys Ifans, Keith Stanfield, Ben Schnetzer o Joely Richardson.