Las bolsas vivieron una jornada alcista a la espera de lo que pueda decir hoy el presidente del BCE, Mario Draghi. De momento, solo quieren conocer cuál es su disposición a tomar nuevas medidas para empujar el crecimiento europeo, debilitar la moneda europea y elevar la inflación. La poca efectividad del programa de compra de deuda, a pesar del leve repunte en la concesión de créditos, hace dudar a los analistas sobre el siguiente paso, puesto que Alemania podría oponerse de nuevo y el margen de maniobra se ha reducido. En todo caso, no se prevé ninguna decisión importante en la jornada de hoy, y de optar por más medidas de estímulo, el BCE no daría el paso hasta el próximo año, según la mayoría de las previsiones. Al encuentro del banco central europeo le seguirá el próximo miércoles el de la Fed. Tampoco allá están las cosas claras, y la casi segura subida de los tipos de interés en octubre ha dado paso a una reflexión sobre la fortaleza de su economía y los efectos adversos de un giro en la política monetaria. El Ibex reaccionó tras dos días de bajada y terminó en los 10.157,50 puntos, tras anotarse un 0,56%. Los expertos ponderan la vuelta que se dio en los 10.000 puntos, nivel puesto a prueba al inicio de sesión. También hubo ganancias en Fráncfort (+0,89%), París (+0,46%) y Londres (+0,05%). Dentro del Ibex, los títulos de Iberdrola (+0,86%) respondieron tibiamente a sus resultados. Hasta setiembre ganó 1.920 millones de euros, un 7,8% más. Técnicas Reunidas (2,15%) y Bankia (+1,75%) encabezaron los avances, frente a OHL (-4,02%), que cayó por quinto día consecutivo. En París, el más fuerte era Valeo (+2,81%), mientras que Publicis (-3,24%) encajó el peor balance.