Los inversores europeos dieron carpetazo a la sesión sin conocer las palabras de Janet Yellen, presidenta de la Fed, sobre el escenario económico y la subida de los tipos de interés. Según pasan las semanas y se acumulan datos débiles en Estados Unidos, se hace más fuerte la opinión de que no tocará el precio del dinero hasta el próximo año. La desaceleración de China, con sus consecuencias para las materias primas y el mercado de divisas, ha trastocado los planes de la Fed y ahora no encuentra buenos argumentos para dar el esperado giro de su política monetaria. La jornada en la bolsa no fue un dechado de confianza, aunque por la tarde los inversores empujaron la gráfica hacia arriba con el apoyo de Wall Street, que se animó por los resultados empresariales y la subida del petróleo. Apple registró un beneficio récord de 53.394 millones de dólares en su ejercicio fiscal y supera las ganancias de Exxon en 2008. Sus acciones subían cerca de un 3% a la hora del cierre en Europa. El Ibex volvía a colocarse sobre los 10.400 puntos y sugiere un cambio de dirección. Hoy comenzará con 10.421,90 puntos, después de ganar un 0,96%. En Fráncfort (+1,31%), París (+0,90%) y Londres (+1,14%) los avances fueron parecidos. Dentro del Ibex, el más fuerte era Sacyr (+4,72%), mientras que entre los grandes despuntó Repsol (+4,47%), favorecido por la subida del crudo. De los perdedores, el peor fue Dia (-2,40%), golpeado de nuevo por la decepción de sus cuentas. También cayó Sabadell (-1,33%), afectado por la posible retroactividad de las cláusulas suelo. BBVA, Santander y Telefónica sumaron más de un 1%. En París, Solvay (+3,80%) y ArcelorMittal (+3,70%) registraron las mayores ganancias.