El presidente del Gobierno español en funciones, Mariano Rajoy, criticó ayer en Durango la visita de Arnaldo Otegi al Parlament catalán y la despedida que le hicieron a Hasier Arraiz en el Parlamento de Gasteiz.

Rajoy se desplazó a Durango para hacer entrega del Premio Jesús María Pedrosa, edil del PP muerto por ETA en junio de 2000, dentro del foro «Libertad y convivencia en la Euskadi actual: memoria en clave de futuro». El dirigente del PP dijo de Otegi que «nunca respetó la democracia, la libertad y los derechos de los demás».

En esta línea, criticó que «algunas instituciones alberguen a personas que, como Arnaldo Otegi, han causado tanto sufrimiento y daño, por lo que solo podemos redoblar el compromiso y afirmar que ni los terroristas ni sus cómplices se verán legitimados nunca».

En cuanto a la despedida que el Parlamento de Gasteiz hizo a Hasier Arraiz el pasado viernes, Rajoy afirmó que «podrán aplaudirlo, jalearlo, reunirse y reírse de mucha gente, pero no tendrán nunca la razón legal y moral».

«Aplaudieron –dijo el dirigente del PP– a quien ha tenido que dejar de ser parlamentario por ser inhabilitado por la justicia por pertenecer a ETA».

Tras señalar que la democracia española ha tenido «grandes demócratas», Rajoy se felicitó de que muchos de ellos hubieran acudido al acto organizado por el PP en Durango, aunque lamentó que «son muchos los que nos faltan», en referencia a las víctimas de ETA.

También calificó de «buena noticia» que se lleve «más de una legislatura completa sin víctimas del terrorismo», y lo atribuyó «al triunfo de la ley, la convivencia y los valores de la España constitucional».

No obstante, precisó que queda «labor» por hacer, como «conseguir que ETA deponga las armas y deje de existir», así como «el deber de recordar y decir a las generaciones jóvenes que nuestra democracia, convivencia y libertad fueron ganadas al más alto de los precios».

En el mismo acto, Rajoy perfiló los grandes objetivos del PP para las próximas elecciones, entre los que citó «las reformas institucionales que exijan las circunstancias, la defensa de los derechos de las personas y de sus libertades y la defensa de la unidad de la nación española, de la igualdad entre españoles y de la soberanía nacional».

«España será lo que decidan todos y cada uno de los españoles y no solo una parte de los españoles», advirtió.

En el mismo acto de Durango intervino el presidente del PP de la CAV, Alfonso Alonso, quien consideró una «vergüenza» la despedida hecha a Arraiz en la Cámara de Gasteiz y acusó al PNV de «abrazarse a Batasuna y enaltecer etarras».