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Erdogan amenaza con dejar de ser «la barrera de los problemas» de Europa

Recep Tayyip Erdogan advirtió de que Turquía «dejará de ser la barrera de los problemas de Europa y os dejaremos solos con ellos». El presidente turco reaccionó así al reconocimiento del genocidio armenio en el Bundestag, y en alusión al acuerdo con UE sobre refugiados.

Al día siguiente de que el Gobierno turco intentara rebajar la tensión con Berlín por el reconocimiento del genocidio armenio por parte del Bundestag, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, volvió a elevar el tono y cargó duramente contra Alemania, y toda la Unión Europea, y amenazó con dejar de ser una «barrera» a los problemas de Europa, en referencia al acuerdo sobre la expulsión de refugiados.

«Hago un llamamiento a Alemania y a toda Europa. O resolvemos los problemas en nuestra agenda de forma justa o Turquía no será una barrera frente a vuestros problemas y os dejará solos con ellos», advirtió el presidente turco.

«Estamos hartos de que nos pongan más dificultades sobre los hombros. O resolvemos los problemas o seguiremos nuestro propio camino», dijo el jefe del Estado durante una intervención en un foro económico en Estambul.

«Un chantaje»

A su juicio, las acusaciones de genocidio por la matanza de cientos de miles de armenios por parte del Imperio otomano en 1915 no responden a la preocupación por el pueblo armenio, sino que «son un medio de chantaje contra Turquía y ha comenzado a ser utilizado incluso como un castigo». «Nuestra actitud sobre la cuestión armenia es clara desde el comienzo. No aceptaremos nunca las acusaciones de genocidio», insistió Erdogan. En su opinión, la resolución del Parlamento alemán «no tiene absolutamente ningún valor» y no modificará nada la posición turca. Los diputados alemanes «no han tenido en cuenta el hecho de que se arriesgan a perder un amigo como Turquía», advirtió Erdogan en una declaración a los periodistas previa al discurso.

El presidente añadió que Ankara no quiere «dar la espalda a Europa» y que hay cinco millones de ciudadanos de origen turco en la UE. «Tan solo queremos un trato justo», reclamó.

El pasado viernes, el primer ministro turco, Binali Yildirim, había intentado suavizar el tono afirmando que «Turquía y Alemania son dos aliados muy importantes» y sus relaciones «no se deteriorarán por completo».