Todos los amantes de la música en general y del flamenco en particular, tenemos que estar de enhorabuena por haber sido Ariadna Castellanos abducida por el propio flamenco. Hoy, la veremos en Iruñea, dentro del festival Flamenco on Fire.

¿Cómo fue el descubrimiento del flamenco para Ariadna Castellanos?

Cuando era adolescente tenía un vecino en Huelva que era guitarrista flamenco. Él fue la primera persona que me lo descubrió. A partir de ahí me interesé y me metí en este mundo tan apasionado.

¿Dentro de qué disciplinas se inició musicalmente?

Empecé a estudiar música clásica cuando tenía cinco años y a partir de ahí fui descubriendo nuevas fórmulas.

¿Qué le aporta el flamenco que no lo hagan otras músicas?

Cuando empecé lo que más me interesaba y llamaba la atención era la parte rítmica. En la música clásica, los pianistas están acostumbrados a tocar solos sin que nada les influya y el flamenco tiene una parte muy visceral y muy poderosa que me llamaba mucho la atención. Luego están los palos del flamenco, que hay una gran profundidad que no tienen otras músicas. Cuando toqué con palmas y cajones flamencos, descubrí que me aportaba mucho y me daba una nueva vida a nivel artístico.

Están Chano Domínguez, Dorantes, Diego Amador, La Reina Gitana y un largo etcétera de pianistas flamencos, sobre todo de una generación joven. Parece que el piano flamenco tiene buena salud…

Sí, ahora sí. Cuando yo empezaba todo el mundo te decía que con el piano no se podía hacer flamenco y tan solo estaban Dorantes, Chano y pocos más. Poco a poco ha surgido una generación de pianistas flamencos como Sergio Monroy, Ricardo Miño, Miriam Méndez, etc… y parece que hemos sido aceptados dentro del flamenco. Me alegro por ello, porque creo que el piano tiene muchas posibilidades y puede aportar nuevos ingredientes.

Para alguien que descubrió el flamenco una vez comenzada su carrera, ¿fue muy difícil interiorizar sus formas estilísticas y expresivas?

Sí, sobre todo yo que venía del mundo del clásico, ya que lo que aprendemos lo hacemos a través de partituras y cambiar ese concepto de raíz es complicado. El flamenco viene de la tradición y de oído, es otro lenguaje totalmente distinto ya no solo al clásico, sino a cualquier otro concepto musical.

Al principio, para interiorizar ese lenguaje lo que me hacía falta era dedicarle tiempo, pero fue un proceso muy bonito ya que era consciente de que estaba andando un camino que aún no estaba hecho, ya que en el piano flamenco no hay una manera concreta de tocar. El piano dentro del flamenco aún se está construyendo y eso para un músico es muy enriquecedor. Te puedes inventar cosas que aún no están hechas y eso es muy transgresor.

¿Y qué le aporta usted de nuevo al piano flamenco hoy en día?

Mi meta es sacarle al piano sonidos diferentes que aún no se han oído en el flamenco, sobre todo en la parte rítmica y de compás y en esa parte de innovación aportando nuevas fórmulas musicales al flamenco, sobre todo en la parte electrónica, ya que para mí es el presente de la música. Eso sí, haciéndolo con mucho respeto. Eso es precisamente lo que ahora hago con Ed is Dead.

¿Cómo surgió el encuentro con Ed is Dead, productor y músico de culto en el panorama de la electrónica?

Con mi primer disco “Black and White”, que además vine a Euskal Herria con este proyecto, me invitaron a un festival y Ed is Dead estaba en la programación Me fascinó cómo hacía la electrónica en directo. Yo quería acercarme a esta música y él tenía esos ingredientes que buscaba. Le propuse hacer un tema los dos y al final hemos hecho un disco entero (risas).

¿En qué circuito está más solicitada, en el del jazz, en el del clásico, en el del flamenco, en el contemporáneo...?

Yo era asidua de citas jazzeras y flamencas sobre todo, pero con este último proyecto con Ed is Dead se ha abierto una puerta a eventos de música electrónica y avanzada, también hemos hecho incursiones con la música indie, concretamente con Vetusta Morla. Se abren nuevas puertas para nuestro recorrido artístico. Tenemos que tener en cuenta que la música clásica también está en un proceso de modernización y eso es algo que me viene como anillo al dedo.