Las Juntas Generales de Araba reclamaron ayer a la Diputación Foral, en manos de PNV y PSE, que asuma, de forma urgente, la atención a personas en exclusión social. Según informó EH Bildu, grupo que presentó la moción, «la exclusión social es uno de los sectores menos desarrollados en el Instituto Foral de Bienestar Social, con carencias que se han puesto de manifiesto una y otra vez desde los movimientos sociales y que incluso se recogen en el Plan Estratégico de los Servicios Sociales».

En el citado plan se establece la necesidad de crear 125 plazas residenciales para personas en exclusión social, «una carencia histórica que ha sido paliada por el tejido asociativo». «La dejadez institucional ha provocado que diferentes asociaciones hayan asumido esa labor gracias a escuálidas subvenciones que se han visto drásticamente recortadas en los últimos años», destacó el procurador soberanista Luis Salgado, que propone dar prioridad a las personas en exclusión social que padezcan enfermedades mentales o procesos adictivos.