El Ibex logró ayer parar, de momento, el golpe del miedo a Trump y pudo cerrar en la línea de salida. Durante toda la tarde, sin embargo, trató de formar un rebote, aunque con ninguna fortuna, ya que Wall Street y el resto de plazas europeas se movían en zona de pérdidas.

Las noticias del día estaban en Gran Bretaña, donde el Tribunal Superior de Londres otorgaba al Parlamento la potestad de aprobar el inicio del Brexit, en vez de al Gobierno, y el Banco de Inglaterra mantenía los tipos de interés y el programa de estímulos sin cambios. Como resultado, la libra pegó un salto al alza y lograba su cotización más alta frente al dólar desde principio de octubre.

La posibilidad de que se rebaje el tono del Gobierno de cara a las negociaciones con la Unión Europea para arrancar mejores condiciones en la salida impulsó a la divisa.

El Ibex terminó con 8.879,90 puntos, tras arañar un 0,07%. El resto de índices europeos volvía a ceder posiciones. Fráncfort recortó un 0,43%, París, un 0,07%, y Londres, un 0,80%. El Ibex se salvó por la defensa de los valores bancarios. Sabadell subía un 2,39%, Caixabank, un 2,25%, y Bankinter, un 1,99%. También se sumaron a la tarea BBVA (+1,21%) y Santander (+1,04%). Por su parte, Repsol ganaba un 1,17%, después de anunciar un beneficio hasta setiembre de 1.120 millones de euros, un 34,6% más. Entre los grandes, el peor era Inditex (-0,54%).

En el capítulo de las pérdidas destacaron Gamesa y Amadeus, con bajadas superiores al 2%. En París, despuntó Société Générale (+5,51%), tras presentar mejores resultados de los esperados en el tercer trimestre. En el otro extremo se colocó Veolia Environnement (-6,34%), que sufrió un severo castigo al rebajar su objetivo de ventas para este año.