Amaia U. LASAGABASTER
Athletic

El Athletic se trabaja la alegría

El gol de Raúl García sentenció un partido atascado durante su primera hora por el intenso trabajo defensivo del Villarreal.

ATHLETIC 1

VILLARREAL 0

 

Un mes después de su última victoria liguera, el Athletic volvió a levantar los brazos. Una alegría triplemente reconfortante porque permite a los rojiblancos recuperar el ritmo, se consiguió ante un rival directo en la pelea por posiciones europeas y mantiene al equipo pegado precisamente a la zona noble cuando el corte en la clasificación se ve ya próximo.

Una alegría, también, ampliamente merecida, y al mismo tiempo apurada. Porque hizo falta que coincidiesen la calidad de Aritz Aduriz, con un control en el área de muchos kilates, la listeza de Raúl García, esperando el rechace de Asenjo en boca de gol, y la duda de una zaga hasta entonces casi impenetrable para desatascar un encuentro que durante su primera hora se había disputado con munición de fogueo. Y que desde el tanto del navarro enloqueció. También a partir de ese momento fueron más y mejores las ocasiones del Athletic pero, conociendo la calidad de un rival que pisó más el área en el cuarto de hora final que en los 75 minutos anteriores, no hubo quien se atreviera a respirar en San Mamés hasta que se detuvo el cronómetro.

Cabía esperar un final así antes de que arrancara el partido, con dos equipos de calidad, con talento ofensiva y con la necesidad de sumar puntos, vistos los codazos en la parte alta de la clasificación. Pero no por lo visto en la primera parte, ciertamente desilusionante. El principal culpable fue un Villarreal al que se vio excesivamente cauteloso: es conocida su competencia defensiva y comprensible que quisiera ralentizar el ritmo, muy por debajo del que le gusta a su anfitrión, pero no tanto que renunciara casi por completo a pisar el área rival por no correr el más mínimo riesgo. Aunque parte de la responsabilidad, lógicamente, recayó en un Athletic incapaz de quebrar la voluntad de la escuadra caste- llonense. Empujaron los vizcainos pero no lo suficiente, o al menos no con el acierto necesario, como para lastimar a un Villarreal bien replegado y sumamente contundente –al cuarto de hora Sansone ya se había ganado una amarilla por una patada a Muniain y Víctor Ruiz debía haber visto otra por una falta a Aduriz–.

Conforme se acercó el descanso, los visitantes se fueron estirando pero su producción ofensiva fue aún más pobre que la del Athletic que, si no golpeó arriba, al menos estuvo tan acertado como su rival en tareas defensivas.

El partido sufrió su primer cambio con el descanso. La insistencia del Athletic en el primer tiempo acabó por dar sus frutos: a la vuelta de vestuarios le metió otra marcha a su juego y al Villarreal, consecuencia del desgaste, empezó a costarle sacar la pelota en condiciones. Los balones llegaron al área visitante con más claridad y los atacantes rojiblancos también empezaron a encontrar espacios para rematar.

El primer aviso serio lo dio Muniain, que recibió de Williams pero cruzó demasiado un balón que se marchó cerca del palo. Probó después Aduriz, con un poderoso testarazo que se fue por encima del larguero. Llegó también el intento, uno de tantos, de Williams –tan inagotable como desacertado de cara a gol–. El más claro hasta entonces, un gran balón en profundidad de Raúl García que el navarro, tras recortar a Asenjo, estrelló en la base del poste.

Se resistía el gol pero fue, por fortuna, cuestión de tiempo. Sobrepasada la hora de juego, el partido se rompió definitivamente. Williams pescó un rechace en el semicírculo, Aduriz controló magistralmente, su remate lo rechazó en corto Asenjo y Aduriz, atento en boca de gol, no perdonó.

El encuentro entró en su tercera fase. El Villarreal, ya no le quedaba más remedio, se estiró en busca de la remontada, Escribá buscó pólvora en el banquillo y el Athletic se mantuvo en sus trece, en busca de la sentencia. Estuvo más cerca de llegar que el tanto rival –aunque Bakambú propinó un susto de muerte, fallando clamorosamente cuando se encontraba solo para rematar un córner en el segundo palo– pero Aduriz, por una vez, no consiguió marcar en ninguna de las dos ocasiones claras que tuvo todavía su equipo.

No hizo falta, así que el Athletic recibirá al Sassuolo con el ánimo alto y visitará Las Palmas con tres puntos más.

 

«Hemos jugado un gran partido», se felicita Valverde

El partido frente al Villarreal dejó plenamente satisfechos a los rojiblancos, por el fondo y por la forma.

«Hemos jugado un gran partido», destacó Ernesto Valverde, que explicó el diferente desarrollo de los dos períodos. «En el primer tiempo hemos tenido mucha dificultad para atravesar sus líneas, ellos tenían cinco jugadores en el medio y nos costaba pasar. El ritmo no era el que nos gustaba y ha sido un partido de mucho desgaste. En el primer tiempo hemos tenido que desgastar mucho para, en el segundo, co más profundidad, poder llegar con más claridad y tener más ocasiones. Cuando ha aparecido el cansancio, nosotros nos hemos mantenido firmes y han empezado a llegar las ocasiones». Entonces sí, también llegó el «gol, hemos tenido entonces más ocasiones para poder hacer el de la tranquilidad, aunque no ha podido ser. Pero hemos ganado a un gran equipo, con el que esperamos compartir objetivos».

En este sentido, el técnico se congratuló por haber ganado a Valencia, Real, Sevilla o el propio Villarreal, «equipos que pensamos que van a estar arriba, donde queremos estar nosotros también» y reconoció que se trataba de una victoria «muy importante» pero recordó que la «medida del equipo» no la dan algunos partidos sino «la temporada entera». Por eso, tampoco quiso dar especial relevancia a la clasificación a día de hoy. «Nuestra intención es mirar siempre adelante, pero no calcular ahora un punto más o menos. Para estar arriba al final, tenemos que ir fijándonos en los partidos que vienen inmediatamente». GARA

 

Reconocimiento a Koldo Agirre y Aritz Aduriz

La Federación Internacional de Peñas del Athletic homenajeó ayer a Koldo Agirre al que le entregó una placa en agradecimiento a su labor. Además, ya en los prolegómenos del encuentro, entregó igualmente una placa a Aritz Aduriz, reconociendo al delantero como el mejor jugador del primer equipo del curso pasado.

 

Sin descanso hasta el próximo viernes

Con compromiso europeo, e importantísimo, de por medio, el Athletic apenas tendrá respiro esta semana. Los rojiblancos entrenarán hoy y mañana en Lezama, el miércoles trabajarán en San Mamés, el jueves se enfrentarán al Sassuolo –los futbolistas no convocados se ejercitarán por la mañana– y el viernes sí, disfrutarán de jornada de descanso.