Dabid LAZKANOITURBURU

Occidente valora con reservas el giro programático y pragmático de Hamas

La diplomacia occidental toma nota pero espera concrecciones del giro pragmático anunciado por Hamas anteayer. Por primera vez en su historia, la organización palestina asegura aceptar un Estado palestino con las fronteras de 1967, lo que enmienda su carta fundacional.

La organización de la resistencia islámica palestina (Hamas) hizo público desde su sede en el exilio en Doha (Qatar) un nuevo programa político en el que acepta por primera vez en su historia la creación de un Estado palestino limitado a las fronteras anteriores a la Guerra de los Seis Días de 1967, es decir, las fronteras del Estado sionista antes de su ocupación de Gaza, Cisjordania y Jerusalén (Al Quds) Oriental.

El nuevo programa político presentado por el líder de su oficina política, Jaled Mechaal, asegura que Hamas «está en guerra con el proyecto sionista que ocupa Palestina y no con los judíos en razón de su religión».

Con este giro, Hamas busca tender puentes con otras fuerzas palestinas como la OLP, de la que, junto con la Yihad Islámica, no forma parte. Así se entiende que considere aceptable «provisionalmente» y asumible «en aras al consenso nacional un Estado palestino enteramente soberano e independiente con las fronteras del 4 de junio de 1967 y con Jerusalén como capital». Pero va más allá y Hamas trata de superar su aislamiento internacional al desmarcarse de su apuesta histórica por una «yihad antijudía».

Oficialmente, el documento no sustituye a la carta fundacional de Hamas de 1988 pero supone un paso más en un debate interno. «Hamas es un movimiento vivo que se renueva», reivindicó Mechaal, quien será sustituido en dos semanas, posiblemente por el exprimer ministro de Gaza, Ismail Haniyeh. quien seguirá su línea pragmática y conciliadora.

Pese a que Hamas insiste en no reconocer al Estado sionista, en evocar la Palestina histórica y en rechazar negociaciones directas con Israel «porque no hay equlibrio de fuerzas», además de en reivindicar la yihad, la diplomacia occidental ha tomado nota del giro. «Es un papel y habrá que ver si se concreta y se plasma en la realidad», matizan, aunque reconocen que la modificación de la carta era una exigencia desde hace años.

Expertas como Leila Seurat (CERI), señalan que la novedad es que el nuevo programa obliga a su brazo armado (Brigadas de Ezzedin Al Qasem), no siempre alineado con la oficina política.

Abbas (ANP) será recibido hoy por Trump

El presidente palestino de la ANP, Mahmud Abbas, será recibido hoy en la Casa Blanca por el presidente estadounidense, Donald Trump, quien desde su llegada al poder ha dado un giro más en la política prosionista de Washington, desmarcándose de las críticas de su predecesor, Barack Obama.

A diferencia de Obama, Trump no considera las colonias «el principal obstáculo a la paz», si bien reconoce que «tampoco ayudan». Desde 2014, cuando el Gobierno ultrasionista de Netanyahu rechazó el último intento de diálogo propuesto por Obama, Israel ha construido miles de viviendas en las colonias y este año proyecta otras 6.000 más. Trump llegó a poner en duda la solución de los dos Estados. Abbas llega debilitado a la cita, con una huelga de más de un millar de prisioneros palestinos liderada por su rival desde la cárcel, Marwan Barghouti, y con las críticas de Hamas, que le acusa de viajar a Washington presionado y para reunirse con un Trump «que no quiere resolver la causa palestina y cuyo único plan es eliminar y liquidar esta jusa causa».GARA