«La alcaldesa de San Juan, que tantos cumplidos dedicaba hace unos pocos días, ahora ha recibido orden de los demócratas de ponerse desagradable con Trump», afirmó el presidente de EEUU, Donald Trump. «Pobre liderazgo por parte de la alcaldesa y de otros que son incapaces de conseguir que sus empleados colaboren en los esfuerzos. Quieren que se lo den todo hecho cuando debería ser un esfuerzo comunitario», añadió.

Horas antes, la alcaldesa, Carmen Yulín, había pedido a las autoridades federales que aceleren la llegada de ayuda. «Esto es lo que hemos recibido la pasada noche en ayuda federal: tres palés con agua, tres palés de comida, y doce palés de comida infantil. Se lo he dado todo a la gente de la localidad de Comerio, que están bebiendo directamente del arroyo. Así que ya está bien de ser educada. Ya está bien de ser políticamente correcta. Estoy cabreadísima», denunció .

«Nos estamos muriendo y nos estáis matando con vuestra ineficacia y con vuestra burocracia», afirmó tras conocer además que miles de contenedores, la mayoría repletos de comida, llevan días detenidos en el puerto de San Juan sin poder salir por problemas logísticos, mientras altos funcionarios se felicitaban de su «buena reacción».

La mayoría de estos problemas están asociados a la ley que restringe el tráfico naval entre puertos de EEUU, y de la que el presidente Trump acabó eximiendo a Puerto Rico el pasado jueves tras días de dilaciones.

Al menos 10.000 personas siguen refugiadas tras el devastador paso del huracán, que ha dejado la cifra oficial de 16 muertos, aunque diversas fuentes apuntan a que podrían ser más de un centenar. Puerto Rico padece aún graves problemas de acceso a comida, combustible y agua. Solo un 4% tiene actualmente electricidad, y solo funciona el 9% de las torres de telecomunicaciones. Además, ayer se emitió una alerta por posibles inundaciones repentinas.