GARA
EL CAIRO

El régimen egipcio admite una baja participación del 42%

El presidente de Egipcio, el mariscal golpista y nuevo rais Abdelfattah al-Sissi, fue reelegido para un nuevo mandato con más del 92% de votos, según las primeras estimaciones publicadas ayer por la prensa estatal –los resultados definitivo se esperan el lunes–, aunque la baja participación de solo el 42% del censo merma su legitimidad.

El diario “Al-Ahram”, el periódico oficial más importante, informó de que Al-Sissi obtuvo cerca de 23 de los 25 millones de sufragios emitidos. Su único contrincante, Musa Mustafa Musa, líder del partido liberal Al-Ghad, obtuvo el 3% de los votos, cerca de 750.000.

El porcentaje de papeletas nulas, aunque no fue especificado, se situaría cerca del 5%, superior al apoyo logrado por Musa.

Con estos resultados, Al-Sissi cumplirá un segundo mandato de cuatro años y permanecerá en el cargo hasta 2022.

En los comicios de 2014, los primeros tras el golpe de Estado que encabezó un año antes y con el que derrocó al islamista Mohamed Morsi, Al-Sissi se impuso con el 96,91% de los votos.

Sin embargo, entonces, la participación se situó en el 47,4%, más de cinco puntos por encima de los registrados esta vez.

Según las cifras aportadas por “Al-Ahram”, la participación está diez puntos por debajo de la registrada en las presidenciales de 2012, las únicas realizadas en la historia del país con garantías democráticas y en las que fue elegido Morsi.

La participación ha sido especialmente baja en Alejandría, la segunda ciudad del país, donde se ha situado en el 35,26%, mientras que en las populosas provincias del Delta del Nilo, como Al-Garbia, Al-Behira o Al- Daqjaliya, rondó el 50%.