GARA
DAMASCO

Disparos de cohetes contra el Ejército sirio y la presencia yihadista hacen peligrar el acuerdo ruso-turco sobre Idleb

Disparos de cohetes lanzados ayer desde la futura «zona desmilitarizada» en la provincia siria de Idleb amenazan la puesta en marcha del acuerdo ruso-turco para proteger el bastión rebelde y yihadista del país.

Este incidente ocurre días después de la supuesta retirada de armas pesadas de la zona tampón, en virtud del acuerdo del 17 de septiembre entre Ankara, apoyo de los rebeldes, y Moscú, aliado del presidente Bashar Al Asad, para evitar el ataque del régimen contra Idleb.

A pesar de que el pasado 10 de octubre Turquía y los grupos insurgentes confirmaron la retirada de las armas pesadas de la «zona tampón», el sábado por la noche se lanzaron cohetes sobre una posición militar en Jurina, en el norte de la provincia vecina de Hama, que, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) mataron a dos soldados. Disparos similares alcanzaron la provincia de Alepo desde otros sectores de la «zona desmilitarizada».

El acuerdo ruso-turco también peligra por el cumplimiento hoy del plazo para la retirada de los grupos yihadistas de esta «zona tampón». Ni el OSDH ni AFP observaron ningún movimiento de repliegue de la organización Hayat Tahrir Al Sham (HTS) –dominada por la antigua rama siria de Al Qaeda–, que controla más de dos tercios de la futura zona desmilitarizada y el 60% de la provincia de Idleb.

El incumplimiento podría abrir la puerta a una ofensiva del Ejército sirio y Rusia en el bastión rebelde-yihadista o bien a que Turquía y sus grupos armados aliados ataquen al HTS.