Raimundo Fitero
DE REOJO

Simbiosis

El franquismo actual, en gran auge y apogeo, se ha vuelto simbiótico. Escuchar a los Franco, los herederos de esas fortunas ilegales, decir en el cementerio, con voz templada y llena de indignación: “Esto es una dictadura”, es uno de los pasajes más depurado del cinismo nacional católico. Hemos analizado este tramo del vídeo con todos los recursos técnicos posibles a nuestro alcance por si acaso encontrábamos o una pizca de asertividad o algunas briznas de humor negro. Y no hemos sido capaces en mi cuadrilla de investigadores de encontrar otra cosa que indignación. Podría haber sido un cachondo que hiciera una humorada. Y no, es la dignidad del fascista, esa que se sustenta en la convicción de que el abuelo fue un salvador, un enviado por Dios. 

Por lo tanto, quedamos con la lección aprendida, que tiene un correlato muy singular en los centenares de franquista conspicuos que cantaban sus cánticos guerreros y que en un momento decían con clara vocación vindicativa: “Prensa española, manipuladora”. Hay que echarle mucho hilo a la cometa para que haga esta cabriola en el crepúsculo manchego. Calma. Mucha calma. Esta es la frase que los manifestantes independentistas catalanes le espetaban a los corresponsales de los medios, especialmente televisivos, en los actos barceloneses. Y a algunos, que tenemos el vicio de mirar, nos parecía que existía una cierta exageración por ser una acusación general, pero que tenían motivos más que suficientes para sentir esa manipulación.

¿Los fachas también? ¿Los periódicos de la caverna, las cadenas del duopolio, las de la Iglesia, manipulan sus actividades o les están dando mucha cobertura? Vox usa en campaña un eslogan de Unidas Podemos de 2016.

Las palabras convertidas en conceptos flexibles. Contexto o simbiosis, esa es la cuestión.