Flanqueado por la presidenta Isabel Iturbe y el director deportivo Rafa Pueyo, Jaume Ponsarnau hizo ayer su presentación oficial como nuevo técnico de Surne Bilbao Basket, fichado para las dos próximas temporadas tras la marcha de Alex Mumbrú a Valencia.

El de Tárrega, que llega a Bilbo después de haber colaborado a Girona a retornar a la Liga ACB, explicó que, aunque todavía quede todo el trabajo por hacer, en cuanto que formar la plantilla, «Miribilla se va a sentir orgulloso de lo que va a ver», así en la competición doméstica como en la FIBA BCL.

«Queremos ser una defensa más proactiva que reactiva y hacer una propuesta incómoda para el rival. Vamos a jugar bien a baloncesto y a partir de ahí generar un orgullo que debe empezar porque el grupo sea un equipo, defienda estos colores a muerte y contagie a la marea negra», explicó el técnico en su primera rueda de prensa. En todo caso, quiso aclarar que su forma de juego «se deberá adaptar a las calidades».

Bromeó Ponsarnau que «no voy a vender humo, porque cuando lo intento, se me nota mucho», por lo que fue muy franco al subrayar que «desde la sensatez de comprender que es muy importante seguir en la ACB, el primer objetivo es ser uno de los 16 mejores equipos» y, una vez conseguido, lograr la mejor clasificación posible.

Ponsarnau llega a Bilbo tras haber sido destituido de Zaragoza. El entrenador catalán apuntó que «mi reto es demostrar que tengo capacidad para hacerlo bien en un sitio como Bilbao. En Zaragoza las cosas no salieron bien. A veces pasa que no encuentras la clave, pero me ha dado una enorme experiencia para ser mejor entrenador y eso es lo que quiero demostrar».

NINGUNA DUDA.

Rafa Pueyo, por su parte, destacó del preparador targarino «sus conocimientos técnicos y tácticos, su larga experiencia tanto en la ACB como en competiciones europeas». No contento con ello, quiso añadir que «por encima de todo, lo que nos ha decidido sumar a Jaume a nuestro proyecto es que no ha tenido dudas. Ha querido estar aquí. Tiene confianza en sí mismo y en el Bilbao Basket y estoy convencido de que esa confianza se va a convertir en un buen trabajo y que los resultados acompañarán».