El politólogo James Waltson cree que, a medio plazo, la expulsión de Berlusconi del Senado puede debilitar al Gobierno de Enrico Letta.

¿La expulsión de Silvio Berlusconi del Senado pondrá fin a su carrera política?

Berlusconi todavía es, y seguirá siendo, muy poderoso, aunque su poder esté declinando. Todavía tiene enormes recursos. Posee sus medios (tres cadenas de televisión, periódicos), tiene muchos partidarios incondicionales detrás y en el seno del Parlamento. Ha obtenido diez millones de votos hace seis meses.

¿Qué consecuencia tendrá sobre la continuidad del Gobierno de Enrico Letta, apoyado por la izquierda y por medio centenar de parlamentarios exberlusconianos desde la escisión de su partido hace quince días ?

A corto plazo va a reforzar al Gobierno de Letta, pero a medio plazo, probablemente lo va a debilitar. Va a privar al centroderecha de alguien que hacía de unión (entre las diferentes corrientes). Durante 20 años, Berlusconi ha tenido cuidado de evitar el surgimiento de cualquier rival potencial, lo que ha hecho muy fuerte al centroderecha. Pero sin el, es muy débil. De alguna manera, la presencia de Berlusconi también ayudó a mantener la unidad del centro-izquierda, que ahora está profundamente dividido. El gobierno se enfrenta a problemas en todos sus flancos.

¿Qué riesgos afronta Berlusconi en el plano judicial privado de su inmunidad parlamentaria ?

Su inmunidad no era total, pero le ofrecía garantías ante una posible detención. No tendrá más esta protección a partir de la noche del miércoles (por ayer). Hay un proceso penal que le preocupa enormemente. Está en curso en Nápoles, está acusado de haber comprado a un senador (para hacer caer en 2006 a la mayoría de centroizquierda de romano Prodi, entonces presidente del Consejo). Hay una posibilidad, aunque sea improbable, de que los jueces ordenen su detención. Podría también ser arrestado por el caso Ruby (por el que ha sido condenado en primera instancia a siete años). Pero creo que los jueces también tendrán en cuenta las consecuencias políticas antes de decidir una eventual detención. Darío THUBURN-Sonia LOGRE (AFP)