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Aralar pide una comisión parlamentaria sobre Esa

Aralar-NaBai ha propuesto la creación de una ponencia o una comisión especial que tenga por objeto buscar una solución a los problemas generados por el recrecimiento del embalse de Esa. Una obra que ha provocado daños estructurales en viviendas de la urbanización Lasaitasuna.

El grupo de Aralar-NaBai quiere crear un foro parlamentario para dar solución a los problemas generados por el recrecimiento del embalse de Esa. Con este objetivo en mente, ha registrado una moción, en la que plantea formar una comisión especial integrada por representantes políticos e institucionales, por los miembros de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) y por los vecinos afectados, que han tenido que abandonar sus viviendas por las obras de ampliación tras los deslizamientos producidos.

En este sentido, el parlamentario Txentxo Jiménez recordó que los vecinos de la urbanización Lasaitasuna llevan casi un año fuera de sus viviendas, afectadas por los deslizamientos provocados por las obras de recrecimiento en una de las laderas del embalse. «Hoy sigue sin haber respuesta o solución a sus problemas», destacó antes de señalar que, «lejos de mejorar a lo largo de este año, el problema se ha agravado y los deslizamientos siguen produciendose, causando nuevos daños e irregularidades».

«A pesar de los más de 25 millones de euros gastados, no hay expectativas de seguridad o habitabilidad futura de dicha ladera», subrayó Jiménez, que recordó la comparecencia de los afectados por el recrecimiento del embalse en el Parlamento de Nafarroa. A este respecto, cabe recordar que el miércoles el portavoz de los vecinos de Lasaitasuna, Jorge Holguín, denunció en la Cámara la gravedad de la situación y puso énfasis en la falta de información que se da desde hace diez años, cuando comenzaron las obras.

33 viviendas vacías

Dicha falta de información ha hecho que los propios vecinos se hayan visto obligados a contratar a un geólogo, Antonio Aretxabala, para saber qué ocurre en la ladera sobre la que se asientan sus casas. Los resultados no pueden ser más preocupantes, ya que pese a los trabajos realizados por la CHE para tratar de frenar la ladera, los deslizamientos se siguen produciendo. La propia CHE lo reconoce en un informe de hace apenas dos meses. Pero sigue sin saber qué hacer ni cómo solucionar los deslizamientos. Echan hormigón, pero no sirve para nada, subrayan los vecinos.

«Se ha jugado con nuestra seguridad y patrimonio, ya que las viviendas tienen hoy precio cero. Los vecinos nunca hemos sido alarmistas. Lo que alarma es la actitud e indiferencia hacia nosotros de la CHE y del Gobierno de Navarra», añadió Holguín, que aprovechó su visita a la Cámara foral para recordar que actualmente hay 33 viviendas a las que no se puede acceder.