Pasó el 25 del mes de mayo, «cuando hace la calor, cuando los trigos encañan y están los campos en flor», y el resultado electoral ha dejado patente que los que ofician de monaguillos del Capital, tanto los que visten de azul mahón como los que usan el rosa, no se han comido un colín. En las españas, de ostentar, entre los dos, el 81% de los votos han pasado a menos del 50%.

Por estos lares los resultados cosechados por los amanuenses al dictado de la Troika (con la excepción de los de Dios y la Ley vieja) han sido todavía peores. Por vez primera en muchos años, los alegres cantos de calandria europeísta del Régimen no fueron lo suficientemente intensos para ocultar, a oídos del sufrido ruiseñor, los de las sirenas neoliberales que conducen al naufragio. Esta vez el ruiseñor no respondió. Quizás ahora empiece a darse cuenta que, por bien que cante la calandria, se trata de una especie diferente. Conciencia de clase la llamaban antes.

Desde Madrid, haciendo acto de contrición, nos abandona un cariacontecido Alfredo Pérez Rubalcaba, el ministro de Felipe González que más reiterativamente ha negado la relación del Gobierno español y del Estado con los GAL. Patxi López asumiendo la derrota anuncia que no seguirá en la dirección del PSOE en las provincias traidoras y desafectas de las Vascongadas.

En la tierra de San Francisco (de Xabier eh... no jodamos. El de Asís era amante de los animales (zoofilia), una parafilia bastante vulgar. El nuestro es el que llevó la salvación de las almas y el «rebozao» al Japón. Ahora algunos listos a los fritos les llaman tempura). Bien, pues en la tierra que algún día asombrará al mundo, nuestro Roberto Jiménez, poniéndose estupendo, con voz grave y simulando una dignidad sobrevenida, tan extraña al perso- naje, anuncia que no será él quien dirija en partido en «el nuevo cambio de ciclo». Sabido ya por el Códice Calixtino de la intrínseca maldad de nabarros y nabarras, circula por el guasapeo de esta tierra una porra sobreel futuro laboral del de Pitillas, que va desde conserje en Destilerías Navarras hasta mascota de Sendaviva, pasando por presidente de la Asociación de Barraqueros, entre otros oficios, menesteres y desempeños.

Los monaguillos azules en Madrí, acusando el castigo, intentan desviar la atención del fracaso de su pérdida de votos maquillando una pírrica victoria del 26% en el Estado anunciando, de nuevo, de una parte, el peligro rojo-separatista (al que se une Podemos) dentro de las fronteras estatales y, de otra, el crecimiento de la desafección por las actuales instituciones europeas en muchos de los países que las conforman.

Similar el argumento de sus «avatares» vascongados: «Hemos ganado. Mucho peor en el resto de Europa». Una alegría: Iturgaiz nos regalará con su presencia. Gracias Carlos.

En Nafarroa, refractaria a la realidad como acostumbra, Yolanda argumenta que UPN no se ha presentado y, por lo tanto, no ha bajado en votos.

Señor, Señor... antes criarán las ranas pelo en los cojones que la Señora abandone el Cortijo de manera voluntaria.

Así que... un esfuerzo más. Nosotros sí podemos.