La viceconsejera de Justicia del Gobierno de Lakua, Ana Agirre, aparece señalada como responsable política del caso Épsilon y no en el de Hiriko, como equivocadamente informábamos ayer, al formar ambos casos parte de la misma investigación parlamentaria.

Fuentes cercanas a la viceconsejera quisieron también aclarar que fue el Departamento de Administración Pública y Justicia quien contrató como asesor informático a José Ramón Fernández de Mendiola y no ella que, según afirman, ni siquiera le conocía hasta que llegó a trabajar a sus órdenes.

Como informó ayer GARA, José Ramón Fernández de Mendiola fue contratado de alto cargo del Ejecutivo nada más caer la empresa Hiriko en la que había sido responsable financiero y administrativo. Siendo asesor, participó en la creación y consejo de administración de la empresa HUB Gasteiz International 2025, liderada por su exjefe Iñigo Antia. El asesor no informó de este paso al Gobierno, que se enteró de ello a través de la pregunta de este diario. Fernández de Mendiola presentó anteayer su renuncia, que fue aceptada.

EH Bildu pidió ayer la comparecencia en el Parlamento del consejero Josu Erkoreka, para que explique «la evidente falta de control del Ejecutivo en relación con el cumplimiento o incumplimiento de la ley que regula las actividades del personal a su servicio». En todo caso, el parlamentario Igor López de Munain destaca «este es un caso más de puertas giratorias, de gente que va pasando por diferentes puestos y cargos, en la empresa privada y en la Administración, y siempre con un denominador común: relación directa con el PNV y retribución en base a fondos públicos».