Alberto CASTRO
Al cierre

Semana de castigo

El Ibex ha recibido esta semana un severo castigo al perder un 6,93%, el peor balance desde junio de 2012. Ayer terminó en los 10.145 puntos, después de bajar un 2,75%. Esta corrección recorta al 2,30% su subida anual. Todos los índices europeos sufrieron fuertes caídas. El Cac descontó un 2,77%; el Dax, un 2,22%, y el FTSE 100, un 2,49%. En lo que va de año, solo el Dax (+0,43%) se mantiene en positivo, en tanto que el Cac pierde un 4,35%, y el FTSE 100, un 6,64%. Los argumentos para este batacazo semanal son sólidos. De un lado, el petróleo sigue hundiéndose de forma vertiginosa -ayer llegó a 61 dólares, precio de julio de 2009-, sin que se atisbe una parada en la espiral bajista. Los expertos apuntan a tres factores: desencuentro entre los productores, crecimiento económico global débil y aumento de las reservas frente a una proyección de demanda a la baja de la AIE. Por otra parte, se mantiene la incertidumbre ante el posible cambio de gobierno en Atenas -la bolsa griega ha perdido un 20% esta semana-, mientras que los datos macroeconómicos en la eurozona están lejos de ser vigorosos. En octubre, la producción industrial crecía un 0,1%, por debajo del 0,2% esperado. En el Ibex, destacó Repsol al dejarse un 5,99%, en plenas negociaciones para comprar Talisman Energy. Telefónica, Santander, BBVA e Inditex restaron más de un 3%. Solo Amadeus (+1,81%) y Grifols (+0,56%) cerraron al alza. En París, los títulos de Technip, Solvay y Schneider cedieron más de 4%. Ningún valor acabó en verde.