La jefa del Gobierno alemán ha señalado que en la actualidad el mercado de deuda padece «perturbaciones sistémicas», como reflejan los diferentes tipos de interés que pagan los distintos países de la eurozona por colocar sus bonos soberanos.
Ha argumentdo que los tipos de interés de unos y otros «están ligados» y que esto ha dejado una «política monetaria perturbada», lo que a su entender justifica la intervención del Banco Central Europeo (BCE) en el mercado secundario.
Como ejemplo, la canciller ha expuesto que los intereses que paga en la actualidad Alemania por sus bonos a diez años son muchos más bajos que hace unos años y ha dejado entrever que ese hecho está conectado con el repunte de las primas de riesgo de otras economías de la eurozona.
Merkel ha recordado que la competencia del BCE es la política monetaria y que en ese ámbito se encuadran sus medidas habituales y sus acciones extraordinarias, como las dos inyecciones de liquidez de diciembre y febrero o el plan de compra de deuda.
El pasado 6 de setiembre, el presidente del BCE, Mario Draghi, anunció un programa «ilimitado» de compra de bonos soberanos bajo una estricta condicionalidad para los países de la eurozona con problemas de financiación.