Los parlamentarios de EH Bildu Unai Urruzuno y Leire Pinedo, en una rueda de prensa en la Cámara de Gasteiz, han tendido la mano al Gobierno de Lakua para modificar el proyecto de Ley de Presupuestos para el año que viene y aprobar unas cuentas más soberanistas, que apuesten por la inversión social y por un ámbito laboral de decisión propio, aunque han reconocido que a día de hoy las posiciones están «muy lejos».

La coalición se reunirá el lunes con Gatzagaetxebarria para darle cuenta de sus planteamientos, que han sido consensuados con agentes sociales.

Urruzuno, en euskara, y Pinedo, en castellano, no han avanzado a preguntas de los periodistas, si la coalición enmendará finalmente a la totalidad el proyecto presupuestario, que se encuentra en tramitación en la Cámara autonómica.

Han aclarado que una vez que se celebre el encuentro con Gatzagaetxeberria, estudiarán si deciden en los próximos días registrar o no la enmienda a la totalidad, en función de la «receptividad» que sus planteamientos tengan en el Ejecutivo de Iñigo Urkullu.

Ambos parlamentarios han planteado que el eje principal de los presupuestos sea el de la «soberanía», para que Euskal Herria pueda tomar sus decisiones propias para salir de la crisis.

Han defendido unas cuentas públicas que apuesten por la participación, por la inversión social, por el compromiso de igualdad entre hombres y mujeres, por la Investigación y el Desarrollo y por la normalización del euskara.

En materia fiscal, EH Bildu ha abogado por implantar medidas en la línea de las aplicadas por la Diputación de Gipuzkoa, con el fin de terminar con el «estatus de privilegio de las rentas de capital y de los beneficios societarios» y apostar por la progresividad real y el reparto de la riqueza, además de por la lucha contra el fraude.

También EH Bildu ha planteado lograr para Euskal Herria la gestión de los impuestos que actualmente competen al Estado español, además de la transferencia de la Seguridad Social y la consecución de un ámbito laboral de decisión propio para evitar la congelación de los salarios de los empleados públicos e implantar la jornada laboral den 35 horas.